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El proyecto se refiere al diseño, financiamiento, construcción, operación y mantenimiento de la subestación Carapongo. La adjudicación se da al consorcio Transmantaro y tuvo una inversión superior a US$100 millones, ejecutada por la empresa propiedad dicho consorcio que tiene a ISA (60%) y EEB (40%). Este proyecto permitirá afianzar el suministro de energía a la ciudad de Lima, proveniente de las centrales térmicas a gas natural ubicadas en Chilca y de las centrales hidroeléctricas de la cuenca del Río Rímac.
Cabe recordar que las obras entrarán en operación en 28 meses contados a partir de la fecha de adjudicación oficial del proyecto y el plazo de entrega de las obras puestas en marcha será a 30 años.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que los 370 kilómetros servirá para generación de futuras centrales hidroeléctricas y líneas de transmisión. Además, se reiteró que hará el transporte de energía entre las centrales hidroeléctricas de Santa Teresa y Machu Picchu y el Sistema de Transmisión Sur. El objetivo de la obra está en mejorar las condiciones sobre el suministro de energía en la zona sur de Perú, con la puesta en marcha de 220 kilovatios.
Carlos Mario Caro, gerente general de Transmantaro, señaló el gran beneficio del proyecto “la obra ha generado en Perú alrededor de 2.000 puestos de trabajo, entre personal técnico profesional y operativo”.
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