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Un precio por encima de $3.900 no se veía desde mayo de 2020 cuando la moneda llegó a $3.926. Se esperan decisiones de la Fed
Julio ha sido un mes de escalada para el dólar: la moneda registró un precio de $3.748,50 en el primer día del mes y ayer cerró en un promedio de $3.904,13, lo que representó un alza de $155,63 en 26 días.
Pero la escalada no termina ahí. La divisa tocó ayer un nuevo máximo del año por cuarta jornada consecutiva (ganó $29,69 frente a la Tasa Representativa del Mercado) y superó nuevamente la barrera de $3.900, un valor que no se veía desde el 18 de mayo de 2020, cuando alcanzó $3.926,06.
Este aumento progresivo en el precio de la moneda estadounidense se debe a la persistente preocupación de los mercados financieros por la expansión de la variante Delta del covid-19, que pone en peligro la recuperación económica global.
Esta incertidumbre ha generado una aversión al riesgo en los mercados, que mantiene a los inversionistas en activos refugio y seguros como el dólar.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante Delta se está propagando 55% más rápido que la identificada en Reino Unido a finales del año pasado. Esta última, según los datos de la entidad, se contagia 50% más rápido que la versión que comenzó la pandemia en 2019.
Desde inicios de 2020, cuando el virus empezó su propagación a nivel mundial, la divisa ha ganado $626,99 frente al peso y durante los últimos 12 meses ha ascendido $213,33. Tan solo en lo que va del año ha subido $471,63.
Otro de los factores que se ha mantenido en la órbita del mercado es la reunión de la Reserva Federal, que concluirá mañana. Después de este evento, es posible que se conozcan los plazos establecidos para que el organismo reduzca su programa de compra de activos; aunque el presidente de la Fed, Jerome Powell, dejó claro en su última comparecencia ante el Congreso que la economía de Estados Unidos aún necesita el apoyo total del banco central.
Para Germán Verdugo, director de Inversiones de Credicorp Capital, este nivel alcanzado por la moneda no se sostendría por mucho tiempo. “Es muy probable que la cotización del dólar en pesos tenga un descanso e, incluso, un retroceso luego de ubicarse por encima de $3.900. Las condiciones macroeconómicas locales y globales sugieren que la moneda debería debilitarse en alguna magnitud en los próximos meses”.
Verdugo agregó que “aunque los mercados financieros no esperan decisiones sorpresivas por parte de la Fed este miércoles, habrá que esperar otra información igualmente relevante como resultados corporativos y el PIB del segundo trimestre”.
El experto resaltó que la desvalorización en algunos activos emergentes, como las acciones chinas, puede ser un factor que esté contribuyendo a un fortalecimiento de la divisa.
El peso continúa entre las más devaluadas
El peso colombiano continúa siendo la tercera moneda emergente más devaluada en lo corrido del año, con una caída de 11,87%, antecedida por el peso argentino, que registra un descenso de 12,83%, y la lira turca, que ha perdido 12,99%. Al activo colombiano le siguen el baht tailandés (-8,88%) y el sol peruano (-7,95%), según datos de Bloomberg. Por ahora se espera que la moneda local se mantenga volátil; pese a que los analistas creen que pronto tocará techo, el panorama se mantiene atado al rumbo que pueda tomar el avance de las nuevas variantes del coronavirus.
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