“Los países necesitan formar ciber-soldados”, Elihu Benedicto Hernández

Desde que los wikileaks y Snowden pusieron a Estados Unidos a los pies de los caballos, todos sabemos del riesgo de los hackers.

Hace poco fue JP Morgan el que sufrió ataques y el temor es que damos información a toda hora. Experto en seguridad informática, este mejicano del grupo del Banco Santander, da unas claves.

¿Serán los ciber-ataques la amenaza más grande para las empresas en el futuro?
No solo para las empresas, también para los gobiernos. Va a ser más fácil dominar o someter a un país por medio del uso de las tecnologías de la información que por medio del despliegue militar. Ataques como el la planta nuclear de Irán, con tecnologías de la información, prácticamente pusieron de rodillas a ese país. Bastan unos simples clicks para detonar una amenaza. Y van a reclutar ciber-soldados. Por eso a Snowden lo recluta Rusia. No porque le quieran dar asilo político sino porque ganan un aliado si tienen que enfrentar una ciber-guerra, un ciber-terrorismo.

¿Qué garantía tengo como empresario de no tener un traidor como él?
Ninguna. La consultora que lo contrató le validó que tenía todas las aptitudes y conocimientos técnicos para desempeñar el puesto, pero en ningún momento pudieron detectar si él iba a traicionar a su compañía o a su propio gobierno. Es imposible de anticipar.

Los hackers van siempre por delante de las empresas de seguridad
Las empresas van por detrás porque son reactivas, los hackers son los que encuentran las vulnerabilidades. Primero atacan y después revelan las vulnerabilidades. Y en ese periodo en que se callan es desconocido la cantidad de objetivos o de información que logran obtener.

¿Pueden desaparecer las identidades de las personas?
Ese no es el foco de los atacantes, no les interesa borrar registros. El futuro de la ciber-guerra está en obtener toda la información posible de proyectos de seguridad de los gobiernos, operaciones encubiertas, desarrollo de nuevas tecnologías. Y no solo a nivel militar, también las grandes compañías como Microsoft, como Apple, están constantemente en una batalla de espionaje para saber quién genera una patente.

¿El éxito no es tanto espiar sino saber interpretar los datos?
Lo que se busca es adelantar tecnologías que no están reveladas al público. Por ejemplo, las investigaciones sobre los ovnis que tiene Estados Unidos es información clasificada. Se supone que si alguien tuviera acceso a esos archivos podría desarrollar nuevas tecnologías para hacer que aviones volaran más rápido, que fueran indetectables al radar. No esperar a un lanzamiento de la tecnología, sino saber antes para no quedarse atrás y no ser presa de un nuevo armamento para los cuales no tendrían defensa.

Con un solo hacker puedes conseguir lo que una red de espías en la Guerra Fría
Claro, ahora necesitas un grupo de ciber espías que estén atacando y en el futuro reclutarán a las mejores personas que dominen todas las tecnologías de la información y terminarán defendiendo incluso un país en el que no nacieron.

¿Lo inteligente, pues, no es formar soldados de jungla sino los mejores hacker?
La tendencia será esa. Los gobiernos, en los nuevos planes de seguridad, se están enfocando en crear ciber-soldados. Están buscando que las instituciones que deben proteger al resto de la nación estén perfectamente entrenadas en este tipo de disciplinas, para que puedan hacer frente a los ciber-ataques de otros países. Va a ser una guerra vía los ordenadores.

¿Es una barrera la juventud de expertos como usted? ¿Un general no lo mira como un insecto?
Poco a poco se está perdiendo esa barrera, sobre todo cuando tienes ciertas especializaciones que avalan los conocimientos que posees. También ayuda la necesidad, porque los gobiernos se han dado cuenta de que si no tienen ciber-soldados, serán una presa fácil de las grandes potencias que, como el gobierno de China, está formando una división en ciber-ataques. Si un país no tiene elementos nacionales para poder defenderse, está obligando a mirar al resto del mundo y contratar a las personas que sean capaces de atacar y defenderlos.

¿Un ejército de mercenarios?
Sí, y lo peor es que el mercenario terminará yéndose con el país que le pague más.

¿Qué nación de América Latina está preparándose?
Donde he visto bastantes avances de manera integral es en Ecuador; ha fortalecido sus leyes y sus programas. En Bogotá estaban creando el año pasado un laboratorio de análisis de malware para anticipar las amenazas.