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El servicio de energía en el país se negocia de dos maneras, por medio de los contratos a largo plazo y a través de la bolsa
Tras el anuncio del presidente, Gustavo Petro, de congelar las tarifas de los servicios públicos, la Asociacion Colombiana de Generadores de Energia Electrica (Acolgen) hizo un llamado al diálogo por medio de un comunicado y señaló cuáles costos van incluidos en el valor de la factura de energía.
De acuerdo con la entidad, en la factura que se paga hay un cobro por cada servicio que se presta para que llegue la energía desde las centrales donde esta se genera hasta los hogares colombianos. Por lo tanto, el valor total se divide de la siguiente manera: 35% corresponde a la producción de energía; 5% a la transmisión del servicio desde las centrales hasta las ciudades; 38% a la distribución desde los centros poblados hasta los hogares o establecimientos; 13% a la lectura de los medidores, la entrega dela factura y el recaudo de esta; 7% para las pérdidas técnicas; y 2% para el mantenimiento y otras labores que garantizan la prestación del servicio.
Acolgen también señaló que en Colombia el servicio de energía se negocia de dos maneras, una es por medio de los contratos a largo plazo, lo que representa 80% de la energía que reciben los ciudadanos. "Son negociaciones bilaterales, dentro de un libre mercado, y cuyo cumplimiento se ejecuta en varios años. Es decir que 80% de la energía que hoy estamos recibiendo se negoció varios años atrás".
La segunda forma es en bolsa, es decir que son negociaciones diarias y sus variaciones repercuten en menos de 6% de la tarifa final de la factura. Estas representan 20% de la energía que reciben los colombianos. "Vale la pena recordar que la bolsa es un mercado de ajuste para los picos de demanda de energía que tienen los comercializadores y que deben acudir a esta opción cuando la energía negociada en los contratos de largo plazo, no es suficiente".
La entidad recalcó la importancia de revisar los balances de oferta y demanda de energía en Colombia para tomar así decisiones. Además, destacó algunos aspectos para comprender la manera en como funciona este sector en el país.
El porcentaje de agua que hay en los embalses refleja la energía disponible. Actualmente, el nivel está 3,21% por encima del mínimo (el esperado por la senda), lo que significa que hoy se cuenta con más de tres días de reservas en caso de que no llueva.
"El país tiene solamente un embalse que tarda alrededor de 1 año en “secarse” mientras más de la mitad, en menos de dos meses sin que les caiga agua (lluvia y afluentes de ríos), estarían por debajo del nivel necesario para entregar energía".
Al comparar la oferta y la demanda, Acolgen señala que el balance ha cambiado significativamente en los últimos años. Esto se debe a que hace 10 años Colombia tenía un "exceso" de oferta de energía, pues los embalses podían abastecer la demanda actual y hasta les sobraba. Sin embargo, con el paso de los años y el crecimiento de la población, los niveles que hay en estas represas ya no alcanzan a cumplir con la demanda de todo el país.
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