"Es antinatural, diría, anti histórico, el que Colombia y Venezuela se separen": Petro

El encuentro entre el presidente Gustavo Petro y su homologo Nicolás Maduro terminó. Algunos temas de los temas que trataron se centraron en restablecer las relaciones diplomáticas, el manejo de la migración y la protección de los Derechos Humanos estarán en la mesa.

El presidente fue acompañado por su jefe de Gabinete, Laura Sarabia; el embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti; el canciller de Colombia, Álvaro Leyva; el embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Ernesto Vargas y otros funcionarios de Gobierno.

Algunas de las aseveraciones por parte de los dos líderes estuvieron centradas la situación fronteriza, el narcotráfico y, más que todo, en la búsqueda de consolidar un escenario de paz entre las dos naciones.

"Es antinatural, en términos más humanos, diría, anti histórico, el que Colombia y Venezuela se separen. Alguna vez ocurrió, en un mal momento, y no debe ocurrir, porque somos el mismo pueblo, lazos de sangre nos juntan" fueron las declaraciones del presidente colombiano.

De hecho, el líder "es difícil diferenciar en las herencias de los colombianos, sobre todo en la frontera, de los venezolanos que recibieron a millones de colombianos hace décadas aquí, es difícil diferenciar genes de uno y otro pueblo. Somos lo mismo, estamos mezclados por la historia, por una raíz común, estamos mezclados por la sangre".

Petro también recalcó que los diálogos se debieron establecer semanalmente y no en esos seis años de no comunicación, por lo que se espera un amplio camino de desarrollo y afianzamiento de relaciones, que, según aseguró, despliega una ruta extensa.

"Ese camino comienza por reconstruir la frontera. La frontera está en manos de las mafias, quedo en manos de las mafias, de lo que llamamos las organizaciones multicrimen, organizaciones cuya cabeza, cuya jefatura, ya es multinacional", aseguró el mandatario.

El Jefe de Estado también prestó especial atención a la comunicación y confianza de los empresarios como componente clave en las relaciones transfronterizas. Se añadió, además, que es trabajo de las dos naciones reconstruir la frontera. "La frontera está en manos de las mafias, quedo en manos de las mafias, de lo que llamamos las organizaciones multicrimen, organizaciones cuya cabeza, cuya jefatura, ya es multinacional", se relató.

"Planteamos hacer una reunión de empresarios colombianos y venezolanos en Cartagena, que sea en Cartagena, devolviendo nuestra visita aquí. Para que ellos mismos construyan los lazos de manera libre, que se fortalezcan las bases de un comercio, ojalá poderoso, ojalá plural, donde el pequeño campesino pueda llegar a aquí, donde el pequeño campesino de aquí pueda llegar a allá; comercio también popular, en las economías populares", apuntó.

Recalcaron que la guerra antidrogas ha dejado millones de muertos y una democracia débil. Por tanto, esperan reconstruir las relaciones que había a nivel de inteligencia para poder golpear a los dueños del capital que, como dijeron, "son los que casi nunca se han golpeado, que son peligrosos para la estabilización política, que además demanda, ojalá, una gran conferencia latinoamericana de presidentes para reexaminar el fracaso que en las últimas cinco décadas hemos cometido".