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En Europa y África, han mantenido su presencia en las mesas de diciembre durante siglos, asociados al clima y al calendario festivo
Las celebraciones navideñas en distintos países suelen estar acompañadas de preparaciones que combinan ingredientes locales, disponibilidad estacional y tradiciones religiosas o familiares. En Europa y África, algunos platos han mantenido su presencia en las mesas de diciembre durante siglos, asociados tanto al clima como al calendario festivo.
En India, el pastel de frutas es uno de los postres más representativos de la Navidad.e elabora a partir de una base de harina, mantequilla, huevos y azúcar, a la que se incorporan frutas secas y confitadas como pasas, dátiles, ciruelas, cáscara de naranja y, en algunas versiones, piña confitada. A diferencia del pastel británico, el uso de especias es más marcado e incluye canela, clavo, nuez moscada, jengibre y cardamomo, ingredientes comunes en la repostería india.
En Inglaterra, el pudding de Yorkshire forma parte de las comidas festivas cuando se sirve como acompañamiento de carnes asadas. Elaborado con una mezcla básica de harina, huevos y leche, se cocina en moldes con grasa caliente, lo que le permite inflarse durante la cocción. Aunque su origen está vinculado a la cocina cotidiana del norte de Inglaterra, su inclusión en comidas navideñas responde a la tradición del asado dominical.
En África occidental y el Caribe, la sopa de okra es un plato frecuente en reuniones familiares de fin de año. Se prepara a base de okra, cebolla, tomate, especias y, según la región, pescado, mariscos o carnes. Su consumo en Navidad está asociado a celebraciones comunitarias y a la importancia simbólica de los platos compartidos, más que a un ingrediente exclusivo de la temporada.
La okra es una verdura similar a la bajoca pero de mayor tamaño típica de África Occidental.
En Francia, los Coquilles Saint-Jacques son una preparación habitual en las comidas navideñas. Se elabora con vieiras, generalmente gratinadas con mantequilla, vino blanco, cebolla o chalota y, en algunas versiones, crema. Su presencia en diciembre está relacionada con la temporada de la vieira en las costas francesas y con la tradición de consumir mariscos en celebraciones religiosas y festivas.
Por su parte, en Europa del Este, especialmente en Rusia y países vecinos, la Zakuski es una selección de aperitivos fríos que suele abrir las comidas festivas de Navidad y Año Nuevo. Incluye encurtidos, pescados ahumados, caviar, embutidos, ensaladas y panes. Su función es ofrecer variedad y facilitar el consumo compartido, una práctica asociada a celebraciones largas y reuniones familiares numerosas.
Estos platos reflejan cómo la Navidad adopta formas distintas según el contexto cultural, manteniendo ingredientes y preparaciones que han sido transmitidos por generaciones y que continúan marcando el inicio de las celebraciones de fin de año en diferentes regiones del mundo.
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