Riedel, fabricante de copas de cristal para vinos, diseñó el “vaso perfecto” para disfrutar una Coca-Cola. Se inspira en la clásica botella Contour y en estudios sobre el comportamiento de los sabores y la evacuación del gas carbónico. Diseñada por un panel de catadores para el contenido de una lata de 355 mililitros, cuesta US$19 y supuestamente enaltece el aroma y sabor de la gaseosa. Habrá que beber.