La participación de la cubana disidente Yoani Sánchez (1975) fue aclamada masivamente en el Hay Festival, y cada crítica a Castro levantaba aplausos; tanto, que una asistente que la controvirtió fue abucheada. Algo similar se evidenció en la charla de Ignacio Ramonet (1943). Quiso defender la gestión de Chávez y se ganó olas de rechiflas y reproches. Como que al público se le olvidó que los invitados tienen derecho, aunque no sean de derecha.