Mantenga encaminadas las reuniones virtuales

Nadie disfruta de una conferencia telefónica incoherente ni de una tele-reunión desorganizada. Como facilitador, su trabajo consiste en mantener las cosas enfocadas. Si el grupo está callado, no sabe si la gente está escuchando atentamente o si está confundida, así que haga una pausa y pregunte: “¿todos me siguen hasta aquí?” Si alguien en la llamada se va por la tangente, puede volver a captar la atención de todos haciendo notar la digresión y volviendo al orden del día: “Pospongamos este punto por un momento. Quiero volver al comentario anterior sobre los problemas metodológicos que estamos enfrentando. ¿Alguien tiene una respuesta para eso?” Cuando una persona se cuelga y sigue reiterando un punto, reconozca su forma de sentir pero desafíelo a que encuentre una resolución: “parece preocupado por esta decisión. ¿Qué piensa que no hemos tratado?”