El cambio climático es una de las mayores amenazas ambientales a la que nos enfrentamos hoy en día, por esta razón, es prioritaria la implementación de estrategias de responsabilidad social y ambiental, que ayuden a mitigar el impacto en nuestro planeta.
No solo es hablar de filantropía como un modelo de adopción empresarial, sino de trabajar con herramientas que ayuden a proteger el medio ambiente y como empresarios estamos en la obligación de velar porque así sea. Colombia necesita más empresas socialmente responsables, que contribuyan al ahorro de energía y realicen un uso eficiente del agua.
En el caso de Centro Chía se han realizado importantes cambios al interior del complejo comercial, por ejemplo, las luces alógenas fueron cambiadas por LED, lo que ha llevado a un considerable ahorro de energía, al mismo tiempo, con la remodelación de baños llegan sofisticados equipos automatizados para aguas y sanitarios, lo que evita un derrame de recurso hídrico y por ende una disminución en el consumo de agua.
Las compañías deben generar conciencia del manejo de residuos aprovechables, actualmente lideramos una campaña e invitamos a las marcas a participar, de esta manera se orienta al personal, visitantes, proveedores, y demás actores que convergen en el centro comercial, a construir una nueva cultura corporativa en aras de mejorar la calidad de vida con una mirada socio-ambiental.
Por esta razón, la contribución empresarial es importante, los líderes de las compañías deben reforzar las campañas orientadas para el cuidado del medio ambiente, que afortunadamente, en los últimos años han avanzado a grandes pasos para convertirse en una directriz de conservación de los recursos naturales.
La sociedad exige un cambio en las políticas ambientales, un primer paso sería impartir capacitaciones grupales a los locatarios, cabe resaltar que fomentar la responsabilidad ambiental como una labor de todos no es solo encasillarse en actividades netamente de reciclaje, sino adoptar políticas internas dentro de las compañías para conocer el impacto ecológico que genera la labor.
Un líder no escatima esfuerzos a la hora de implementar nuevos acercamientos con otros actores, sean vecinos, colegas, empleados, entre otros, para así contribuir a la desaceleración del daño de la capa de ozono a través de soluciones eficientes como el aprovechamiento de residuos, aguas lluvias, energía, y demás factores que afectan el medio ambiente.
A nosotros nos enorgullece ser el único complejo comercial que cuenta aproximadamente con 30.000 metros cuadrados de parque, convirtiéndolo en uno de los mayores atractivos, debido al gran espacio verde y natural que incluye lago, peces, tortugas, patos, garzas y aves de la región.
