Desde 1972 la Organización de las Naciones Unidas viene organizando encuentros globales para tratar temas ambientales y aunque han pasado más de cuatro décadas de discusiones internacionales aún falta mucho por lograr.
Esta es la razón por la que 350 líderes nacionales e internacionales se reunieron durante tres días en Bogotá para celebrar una nueva edición de Río+20, una cumbre que tiene como objetivo fomentar la construcción de ciudades sostenibles.
La tercera edición de este encuentro, pues se realizó en 2012 en Río de Janeiro, en 2013 en Berlín y este año en Bogotá, tocó una diversidad de temas relacionados con la ecología, aunque el protagonismo se lo llevaron dos temas clave: la movilidad alternativa y la generación de otros tipos de energía.
Referente a la primera temática, no solo se desarrollaron foros y discusiones académicos sobre la necesidad de hacer un lado el vehículo y empezar a darle espacio en las urbes a otras modalidades de transporte, como la bicicleta. También se hicieron demostraciones de algunas opciones que tienen los ciudadanos para moverse dentro de la ciudad sin contaminar. Una de ellas es el taxi eléctrico, unidad que estuvo disponible para que los asistentes a Río+20 hicieran test-drive.
Actualmente, hay 38 taxis eléctricos en Bogotá, autos que han recorrido más de 1,2 millones de kilómetros y consumido cerca de 400.000 kilovatios hora (kWh), lo que evitó la emisión de cerca de 290 toneladas de dióxido de carbono. La meta del gobierno distrital es que este número se eleve a 50 unidades y llevar la movilidad eléctrica al transporte público, específicamente al Sitp (Sistema Integrado de Transporte Público), mediante la ejecución del Plan de Ascenso Tecnológico y el programa Clima y Aire Limpio para Ciudades de América Latina (Calac).
“Con esta iniciativa, la Administración Distrital da el primer paso para la formulación de una política de movilidad eléctrica, avanzando en la modernización y adopción de tecnologías ecoeficientes en el transporte de la ciudad, además de reducir la dependencia de los combustibles fósiles”, señaló Susana Muhamad, Secretaria Distrital de Ambiente.
En el marco de Río+20 también se destacó la nueva ruta de Transmilenio que irá por la carrera séptima (desde el Portal 20 de julio hasta la calle 134) y que se operará con 27 buses híbridos.
Pero un transporte público menos contaminante no fue lo único que se promovió en movilidad sostenible. La bicicleta también fue promocionada como la opción de transporte del futuro, con iniciativas como “Mi estilo es bici” y análisis de expertos.
“Es importante que los ciudadanos entiendan que la bicicleta es una alternativa de transporte y que su uso, así como el del transporte masivo y el caminar, trae beneficios para todos por lo que los proyectos de bici-carriles deben ir siempre sustentados por campañas de educación y sensibilización para que el ciudadano conozca las bondades de los mismos”, dijo William Vallejo, experto en movilidad sostenible, quien moderó la charla “Procesos de transformación hacia ciudades ciclo-amigables”.
Para el subsecretario de Desarrollo Económico, Hernán Ceballos, la gestión del alcalde Gustavo Petro en materia de una movilidad más sostenible en Bogotá es uno de los factores que influyó en que la ONU-Hábitat haya escogido a la capital del país como la sede de esta nueva edición de Río+20. “Obviamente falta mucho por crecer en tendencias más ecológicas, pero esto es un esfuerzo que no solo debe darse por el lado de los gobiernos distritales. El cambio de consciencia también debe registrarse desde los ciudadanos en temas como el manejo y la separación de residuos, el uso racional del agua y la reutilización de las bolsas plásticas, por citar algunos ejemplos”, dijo Ceballos.
El segundo tema que tuvo protagonismo en la cumbre fue la energía. En este sentido, el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos ONU-Habitat, la Empresa de Energía de Bogotá y la Fundación del Grupo Energía de Bogotá, firmaron un memorando de entendimiento de dos años para impulsar y ejecutar proyectos prioritarios en energía, eficiencia energética y producción de energía a partir de fuentes renovable.
“El propósito es, entre otras cosas, establecer un marco de cooperación para el fomento de la eficiencia, ahorro energético y movilidad sostenible”, dijo Sandra Fonseca, presidenta de la EEB.
Este acuerdo incluye trabajo colaborativo entre las partes involucradas, transferencia de buenas prácticas, desarrollo de iniciativas de interés común y apoyo a proyectos de ONU-Habitat.
Se firmó acuerdo entre Bogotá y Quito
Durante el encuentro Río+20 en Bogotá, el alcalde Mayor Gustavo Petro y su homólogo de Quito, Mauricio Rodas Espinel, firmaron un memorando de entendimiento para que ambas ciudades trabajen de manera conjunta en siete temas concretos: gestión documental y archivo, paz y derechos humanos, educación inicial e inclusión, ciudadanía y seguridad, desarrollo económico, competitividad y productividad, movilidad sostenible y basura cero. No se descartó que se trabajen otras áreas que sean de interés mutuo en temas de ciudades sostenibles. El mandatario distrital aseguró que este tipo de alianzas les permitirá a Bogotá y Quito incorporar nuevas tecnologías y modernizar los diferentes sectores, gestionando acciones público-privadas.
Las opiniones
William Vallejo
Experto en Movilidad Sostenible
“Estos diálogos de alto nivel son una oportunidad muy valiosa para que se hable de la importancia de explorar nuevas alternativas de diseño para las calles”.
Sandra Fonseca
Presidenta de la Empresa de Energía de Bogotá
“El propósito del Memorando de Entendimiento es, entre otras cosas, establecer un marco de cooperación para el fomento de la eficiencia y ahorro energético, y la movilidad sostenible”.
