La imagen que generan los éxitos deportivos para un jugador de fútbol no solo le sirven a la hora de obtener contratos publicitarios, sino que les da la posibilidad de aprovecharla para movilizar empresas y recursos con el fin de llevar a cabo obras sociales y programas de responsabilidad social.
En el caso de los jugadores de la Selección Colombia de fútbol, muchos reconocidos internacionalmente, ha sido encaminado para ayudar a niños de zonas vulnerables en varias regiones del país.
Es el caso de los jóvenes Radamel Falcao García y James Rodríguez, y los más veteranos como el Carlos el ‘Pibe’ Valderrama, Iván Ramiro Córdoba y Óscar Córdoba, entre otros. Además, eventos como el del partido que se jugará mañana en Barranquilla han motivado a que empresas como Pacific Rubiales apoyen fundaciones que a través del fútbol trabajan con menores.
“Los jugadores conocen bien el contexto y la realidad en la que nacieron, por eso es muy importante que ellos lleven adelante labores sociales. Uno de los aspectos de la Responsabilidad Social es conocer e interpretar muy bien el contexto, con el fin de agregarle valor para que la comunidad siga creciendo”, dijo Sandra Fuentes, directora de la especialización de Comunicación Organizacional de la Universidad Javeriana.
Los que todavía están en la cancha
Dos de las figuras de la Selección Colombia en la actualidad no solo se destacan en la cancha, sino también porque adelantan campañas y tienen fundaciones para ayudar a niños en zonas deprimidas de varias ciudades.
Por el lado de Falcao, además de contar con una fundación en Bogotá, se unió a una campaña con la marca de relojes Hublot y el Programa de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc). Parte de las ventas de relojes de los cuales el jugador es la imagen oficial serán destinadas para realizar obras en la Ciénaga Grande de Santa Marta. El año pasado había realizado esta campaña con la fundación Fútbol con Corazón, a la que entregaron US$30.000.
“Ese dinero sirvió para ayudar a 160 niños en el barrio La Paz, de Barranquilla, y se implementaron en el desarrollo de nuestro modelo pedagógico. El fútbol es un vehículo extraordinario para enseñar valores, cambiar actitudes, dar habilidades para la vida”, afirmó Samuel Azout, director general de la fundación.
Por su parte, James Rodríguez creó hace año y medio Colombia Somos Todos, la cual organizó con ayuda de su familia para trabajar con menores de Ibagué, aunque también tienen proyectos de llevarlo a Medellín y Bogotá. A través de ella no solo involucran a los niños, sino también a sus familias, por lo que hoy tienen a 60 personas vinculadas.
“El proyecto es utilizar el fútbol como motivación para tener un proceso pedagógico, un acompañamiento psicológico y familiar. Queremos potenciar las habilidades de los niños y convertirlos en unas personas que en cualquier contexto social puedan desarrollarse fácilmente”, aseguró Andrés Rubio, director de la fundación y tío de James.
Los que ayudan desde el retiro
El que más sobresale es el ‘Pibe’ Valderrama, pues a través de Demos una oportunidad (Duo) y alianzas con la Alcaldía de Barranquilla como ‘Todo bien por Killa’, busca estimular a niños y adolescentes de colegios oficiales de distritos y de barrios con dificultades en la ciudad.
Sin embargo, otros como el exjugador del Inter de Milán Iván Ramiro Córdoba lleva cerca de 10 años adelantando programas sociales con niños en Rionegro, Antioquia. La fundación Colombia te quiere ver es dirigida por su papá, Ramiro Córdoba, quien está a cargo de los asuntos operativos en Colombia.
“Cada año tenemos un compromiso de darle almuerzo a 150 niños entre 12 y 15 años de edad. Además los ayudamos con tratamientos psicológicos. Iván ha ayudado a gestionar ayudar con Intercampus, del Inter de Milán, quienes han dado patrocinios a escuelas de fútbol en Santa Marta y en Cali. En algunas veredas de Antioquia durante estos años ya hemos logrado hacer un centro comunitario, una capilla y una cancha polideportiva”, dijo Córdoba padre.
En este grupo también está el exarquero de la Selección Colombia Óscar Córdoba, quien se ha unido a campañas de empresas como Herbalife y el banco Bbva. Con este último, realiza viajes por todo el país y entrega útiles, mientras que con la multinacional de suplementos nutricionales llevan becas y patrocinios para jugar.
Las empresas que sacan jugo
Además de que la labor que realizan los jugadores, empresas del país también se apuntan para hacer su aporte. Es el caso de la petrolera Pacific Rubiales, que a través de la fundación Fútbol con Corazón lleva a niños de barrios deprimidos de Barranquilla a ver partidos de la Selección.
“Este viernes llevarán a 180 niños de Soledad, el barrio Siape y La Paz, lo cual es muy bueno porque estar en el Estadio Metropolitano los anima y motiva”, aseguró el director de la fundación Samuel Azout.
Samuel Azout
Director ejecutivo de la Fundación Fútbol con Corazón
“El fútbol es un vehículo extraordinario para enseñar valores, cambiar actitudes, dar habilidades para la vida. Eso ayuda a que las organizaciones miren una manera para ayudar”.
Sandra Fuentes
Directora de la especialización de Comunicación Organizacional U. Javeriana
“Uno de los aspectos de la responsabilidad social es conocer e interpretar muy bien el contexto, con el fin de agregarle valor para que la comunidad siga creciendo”.
Andrés Rubio
Director ejecutivo de la Fundación Colombia Somos Todos
“El proyecto es utilizar el fútbol como motivación para tener un proceso pedagógico, un acompañamiento psicológico y familiar. Queremos potenciar sus habilidades”.
