Una feria de antiguedades con piezas del periodo ‘entre guerras’

Entre el 24 y 27 de abril se inaugura la XXX Feria de Antigüedades y del Coleccionismo de Bogotá, que espera mover durante estos cuatro días negocios por $500 millones. La exposición se llevará a cabo en el antiguo claustro de la Iglesia de Santa Bárbara, en el parque de Usaquén.

El presidente de la Asociación Anticuarios de Colombia, Alfonso Guzmán, asegura que se exhibirán mercancías por alrededor de un millón de dólares.

“En negocios, estimamos que se muevan alrededor de $500 millones durante los cuatro días, pero esperamos que la posventa puede llegar a otros $500 millones. Es lo estimado que pensamos que suman los negocios de cada uno de los expositores, recaudando un total global de $1.000 millones durante el mundial de la feria”.

Este evento cultural se ha convertido con el correr de sus 16 años en un punto de referencia obligado para los aficionados a las antigüedades en Colombia y Latinoamérica.

Entre los objetos de esta muestra de los anticuaristas bogotanos, se encuentran exclusivas piezas de mobiliario tales como secretaires, canapés, sillones, consolas, vitrinas, bibliotecas y espejos dorados de los más diversos estilos de los siglos XIX y XX.

Se destacan también piezas europeas, especialmente del estilo Art Déco, tan apreciado por los conocedores del período artístico de ‘entre guerras’. Además, no faltan los finos objetos de cristal, las reflugentes piezas de platería de todas las épocas, los gobelinos franceses, las apreciadas tallas de santos coloniales, las pinturas al óleo de la Escuela de la Sabana, las de tema religioso y los artísticos bodegones.

A lo largo de estos cuatro días, de esta, la única feria profesional de antigüedades de Colombia, se reúnen destacadas personalidades del mundo del arte como pintores, arquitectos, diseñadores, decoradores, coleccionistas, entre otros.

Guzmán afirma que en la feria de antigüedades del 2013 aproximadamente se logró recaudar $600 millones en negocios globales, y que el interés es que siga creciendo. El evento tiene lugar en Bogotá dos veces al año.