Bruto, la maestría del ‘picoteo’ en Bogotá

La comida y el vino español tienen un lugar especial en Bruto. Un restaurante con más de dos años en el sector de Quinta Camacho que se ha caracterizado por la sazón, exquisitez y presentación de sus platos.

Bajo su concepto de ‘picoteo’ reúnen algunas de las más tradicionales recetas ibéricas, cada una con un toque colombiano especial. Entre ellas destacan las croquetas, camarones orly, papas bravas, orejas de cerdo, tiraditos y carpaccio. Cada una con texturas de cremosidad, técnica de la que se sienten orgullosos sus propietarios Felipe Arizabaleta y Lucho Carrión.

Todo esto se refleja en una gran experiencia que viven los clientes. Así lo define Lucho Carrión, chef consulting de Bruto. “La gente que viene a nuestro restaurante sabe que la va a pasar chévere con amigos o con su pareja. El concepto que manejamos busca que se haga un compartir y disfruten de varios menús que tenemos mientras charlan y pasan un rato agradable acompañados de buena música”, sostiene.

El ticket de este ‘picoteo’ tiene un precio de $70.000 aproximadamente. Sin embargo, Carrión destaca que a los clientes no solo se les vende un plato más o el nombre de un cocinero, sino la experiencia.

“Esto es lo más importante y para ello trabajamos día a día. Queremos que las personas se sientas cómodas y disfruten de principio a fin del servicio y por supuesto de la carta que le ofrecemos. De eso ese trata este negocio”, destaca este venezolano que estuvo por muchos años en distintos países europeos conociendo de su cultura y gastronomía.

Otros de los platos recomendados de Bruto es la morcilla de Madrid - Cundinamarca con papa rota y chimichurri; el carpaccio de pulpo con vinagreta de verduritas, crema de aguacate y crujientes de arracacha; y el solomillo sobre verduras asadas, cebada perlada y mantequilla maitre d´hotel.

Pero estos no son los únicos menús que encuentran los que visitan el lugar, también pueden encontrarse con platos para una persona como las carnes y los pescados (con rangos de precios entre $23.000 y $32.000).

Un lugar que gusta por ese toque casual y contemporáneo en su diseño y ambientes de comedor y bar. Al llegar usted se encuentra con la fachada de una casa antigua, enredaderas como parte de su decoración y un pequeño aviso que le da la bienvenida a una cultura y aventura con la comida española. Así mismo, apetecidos platos de la clásica cocina vasca, sencillos en ingredientes y ricos en sabores.

Como acompañante le ofrecen una selecta carta de vino español. Una combinación perfecta para los amantes del buen gusto pero sobre todo para el buen paladar.

Si prefiere algo más suave porque va en plan de medio día, puede probar los cocteles que allí le ofrecen, cada uno con combinaciones de sabores que lo hacen un buen aperitivo. Entre los que recomienda el chef está el marranito, penicilina y blanco.

La atención y amabilidad de sus meseros es otro de los ingrediente que tiene Bruto, pues logran que cada uno de los platos que se escogen sea lo más cercano a su gusto y preferencia.

El horario de atención es de lunes a sábado desde las 12:30 del medio día hasta las tres de la tarde; y en la noche de siete a 11 (la cocina). Si quiere disfrutar de la música y el trago puede estar hasta las dos de la mañana. Los domingos de una a cuatro de la tarde.