Shell recorta proyección de sus ganancias en el cuarto trimestre de 2013

Royal Dutch Shell recortó su proyección de ganancias del cuarto trimestre de 2013, citando diversos problemas y enormes desafíos de los que va a tener hacerse cargo el nuevo presidente ejecutivo de la firma, Ben van Beurden.

El cambio de panorama llega casi 10 años después de que Shell, la tercera mayor petrolera del mundo occidental, redujo dramáticamente sus estimaciones de reservas. Además se produce después de una advertencia similar de su rival Chevron Corp, la segunda mayor petrolera de Estados Unidos, hecha la semana pasada, en un reflejo de cómo la industria está teniendo que lidiar con menores reservas, precios del petróleo y la necesidad de controlar los costos.

"Nuestro desempeño en 2013 no fue lo que esperaba", dijo Van Beurden tras el anuncio del recorte de la proyección de ganancias sobre una base de costo actual de suministro (CCS, por su sigla en inglés), excluyendo ítems identificados, a US$2.900 millones, frente a las expectativas del mercado de casi US$4.000 millones.

La última vez que la firma anglo-holandesa reportó una cifra de ganancias ajustadas tan baja como la cifra dada a conocer fue en el cuarto trimestre de 2009. Desde entonces, el principal cálculo operacional había promediado los US$5.600 millones por trimestre.

Analistas dijeron que Shell parece haber sufrido una tormenta perfecta en los últimos tres meses debido a débiles márgenes de utilidades en refinación, mayores costos de producción, interrupciones en Nigeria y la depreciación del dólar australiano. Sin embargo, consideraron que la advertencia lanzada por Shell también le permitiría al nuevo presidente ejecutivo, quien ha estado en la firma desde 1983, a usar el día que se conozcan los resultados, el 30 de enero, y el mes de marzo para exponer su nueva estrategia.

Shell, cuya historia se remonta a 1833, también incumplió las previsiones de los analistas para su negocio en el tercer trimestre en octubre. En el tercer trimestre, las ganancias CCS excluyendo ítems identificados fueron de US$4.500 millones, frente a US$6.600 millones en el mismo período del 2012.

Un accionista en Gran Bretaña que solicitó el anonimato dijo que nadie está sorprendido con el anuncio, pese a la cifra, y agregó que eso aumentaría la presión sobre el nuevo presidente ejecutivo para que mantenga un mayor control de costos."Existe bastante expectación para cuando tengan sus resultados para el año completo", sostuvo.

"Esta advertencia es un recordatorio de que hay algunos grandes problemas estructurales", agregó. Las acciones del grupo cayeron más de un 4% en la apertura, pero luego bajaban un 2%.
"Nuestra atención se centrará en la mejora de los resultados financieros de Shell, el logro de una mayor eficiencia de capital y en seguir fortaleciendo nuestro desempeño operativo y de ejecución de proyectos", afirmó Van Beurden.