Se busca candidato al puesto más importante de Europa

Concluidas las elecciones europeas, el tema de moda en la capital de Europa es adivinar quién será el próximo presidente de la Comisión Europea. Tras el éxito en las urnas de los partidos más populistas y euroescépticos, los líderes europeos empiezan a desestimar la candidatura propuesta por el Parlamento, Jean-Claude Juncker, y optan por barajar otras alternativas.

Jean-Claude Juncker, ex primer ministro de Luxemburgo
A pesar de no contar con el apoyo de la presidenta alemana Angela Merkel, hasta ahora Junker, ex primer ministro de Luxemburgo, se consideraba el candidato con más posibilidades de hacerse con el puesto. Aunque fue elegido por el Partido Popular Europeo, incluso sus rivales los socialistas acordaron dar su apoyo a la candidatura para que obtuviera la mayoría en el Parlamento.

Jyrki Katainen, primer ministro finlandés
Si el Partido Popular Europeo decide apostar por otra candidatura, el primer ministro finlandés, Jyrki Katainen, sería el elegido. En abril anunció su intención de dimitir con vistas a iniciar su carrera política en la UE. Representa a un país que se ha mostrado muy crítico con la UE, lo que encaja con la voluntad de los líderes de demostrar que han captado el mensaje de cambio.

Donald Tusk, primer ministro de Polonia
Bruselas sabe que uno de los puestos más importantes de la UE tiene que adjudicarse a uno de los «nuevos estados» miembros de Europa Central y del Este. Y ninguno de esos países es más importante que Polonia. Aunque el primer ministro polaco sería un buen candidato, Tusk no habla con fluidez ni inglés ni francés, lo que sería el principal obstáculo para un puesto de estas características.

Enda Kenny, primer ministro irlandés
Aunque ha negado que quiera optar al puesto, su nombre está en boca de los políticos, sobre todo entre los miembros el Partido Popular Europeo, que reconocen el mérito del primer ministro de haber ayudado al país a superar el rescate. Aun así, tras los malos resultados de su partido en las elecciones, es probable que Kenny se quede en Dublín para intentar arreglar las cosas.

Dalia Grybauskaite, presidenta de Lituania
Aunque al principio no parecía estar en la lista, su nombre ha empezado a sonar últimamente porque reúne muchos requisitos: sería la primera mujer presidenta, pertenece a uno de los «nuevos estados miembros» y Merkel parece apoyar su candidatura. No obstante, Lituana carece de influencia en la UE y su falta de cortesía en algunas ocasiones le restan puntos.

Christine Lagarde, directora gerente del FMI
A pesar de que el presidente François Hollande, no parece muy inclinado a apoyar su candidatura, los políticos de la UE siguen insistiendo en su perfil, por razones evidentes. Además de ser conocida en el mundo, y de pertenecer a unos de los países más importantes de la UE, sería la primera mujer presidenta, aunque en Bruselas temen perder a una representante europea en el FMI.

Los socialistas
Aunque es el Partido Popular el que tiene mayoría en el Parlamento, no se descarta que los rivales de centro izquierda se hagan con el puesto, sobre todo si Juncker no lo consigue. En la lista estarían el socialdemócrata alemán Martin Schulz,, la actual ministra danesa Helle Thorning-Schmidt , el ex primer ministro italiano Enrico Letta, y el ex director de la OMC, el francés Pascal Lamy.

El grupo cercano a Barroso
Recordemos que el presidente saliente, Durao Barroso, no estaba entre los favoritos hace diez años. De igual forma, Herman Van Rompuy, ex primer ministro belga, se convirtió en presidente del Consejo Europeo. Por tanto, no conviene descartar a candidatos menos probables como Vladis Dombrovskis, ex primer ministro de Letonia o al primer ministro sueco Fredrik Reinfeldt.