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Colombia sigue siendo el país suramericano que más dinero recibe del extranjero a través de divisas. Pero ese monto se vio reducido en el año pasado en 2,3% en su mayoría porque las remesas provenientes de España cayeron en más de US$260 millones a causa del alto desempleo que azota a Europa.
De los US$16.527 millones que llegaron a Suramérica en 2012 por este concepto, US$4.073 millones fueron recibidos por los colombianos con familiares en el exterior. Según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), América Latina recibió un total de US$61.300 millones en remesas el año pasado. Esta cantidad representa un incremento de apenas US$300 millones, 0,6%, con respecto al monto de 2011.
Según el organismo este crecimiento casi nulo representa un estancamiento en los flujos de divisas que se explica por la disminución de los ingresos de los latinoamericanos en los países desarrollados en crisis.
Ejemplo de esto es lo que está pasando con las remesas que llegan a Colombia desde España. Según datos del Banco de la República, en 2012 se recibieron US$1.148 millones desde ese país, lo que representa una caída de 18,5% respecto a 2011, cuando la cifra llegó a US$1.409 millones. Con esta disminución Estados Unidos tomó el primer puesto como emisor de remesas hacia Colombia con US$1.402 millones.
En total, el país recibió US$4.073 millones el año pasado. Esa cantidad constituye una disminución de 2,2% respecto a 2011. Pero esa variación es mayor si se tiene en cuenta la tasa de cambio y la inflación. En este caso la caída de ingresos recibidos fue de 8%, en pesos colombianos.
Panorama regional
Desde un máximo histórico de casi US$65.000 millones en 2008, seguido por una caída de 15% en 2009 por la crisis financiera global, las transferencias de dinero a la región se han estabilizado.
México sigue siendo el principal receptor de remesas de América Latina con US$22.400 millones, seguido por Guatemala, con US$4.800 millones y luego Colombia; mientras que El Salvador y República Dominicana recibieron US$3.900 millones y US$3.200 millones, respectivamente.
“Los últimos datos muestran que los migrantes siguen prestando un apoyo financiero crucial a millones de hogares en toda la región”, comentó la gerente general del Fondo Multilateral de Inversiones del BID, Nancy Lee. “El impacto de las remesas en el desarrollo podría ser mucho mayor si las familias tuvieran la opción de ahorrar parte de esas transferencias, en vez de convertirlas todas en efectivo”, agregó.
La ayuda sigue llegando a pesar del alto desempleo
Según el informe, desde el último trimestre de 2008, los incrementos en las tasas de desempleo en los países tradicionales de envío, como Estados Unidos, España y Japón, y la consecuente reducción del ingreso de los migrantes latinoamericanos y del Caribe, ocasionaron una disminución sin precedente en el valor de remesas enviadas a la región. A pesar de las dificultades que enfrentan los emigrantes para conservar sus envíos de remesas, los datos muestran que estos flujos aún se mantienen como una fuente importante para la supervivencia de millones de familias en la región.
La opinión
Nancy Lee
Gerente, fondo multilateral de inversiones del BID
“El impacto de las remesas en el desarrollo podría ser mucho mayor si las familias tuvieran la opción de ahorrar parte de esas transferencias”.
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