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La compañía fue sancionada por abuso de su posición de dominio en el negocio de móviles.
Bruselas impuso hoy la mayor multa de su historia. Las autoridades europeas de la Competencia han sancionado con 4.343 millones de euros (US$5.047 millones) a Google por abuso de su posición de dominio en el negocio de los móviles con su sistema operativo Android, que tiene una cuota de mercado en el mundo de 80%. La multa es muy superior a la sanción de 2.424 millones de euros (US$2.817 millones) que impuso la Comisión a Google hace un año, récord entonces en la historia de la institución, por otro caso de abuso del dominio de su buscador para favorecer su comparador de productos, Google Shopping.
"Desde 2011, Google ha impuesto restricciones ilegales a los fabricantes de dispositivos Android y a los operadores móviles para cimentar su posición de dominio en el negocio de las búsquedas", asegura la comisión de Competencia en su resolución. Bruselas exige a Google poner fin a estas prácticas en un plazo máximo de 90 días. En su defecto, deberá hacer frente al pago de hasta 5% de la facturación diaria de Alphabet, matriz de Google.
La investigación de la Comisión contra Google por Android se inició en abril de 2015, y se concretó con un pliego de cargos un año más tarde, en el que el departamento dirigido por Margrethe Vestager acusó formalmente a la empresa estadounidense deabusar del monopolio de facto de su sistema operativo en móviles para promocionar ilegítimamente sus aplicaciones y servicios. Para la comisión, Alphabet obliga a los fabricantes que utilizan su sistema operativo a preinstalar aplicaciones de la compañía como el motor de búsqueda Google Search, el navegador de Internet Google Chorme o los mapas Google Maps.
A pesar de la abultada multa, la sanción representa poco más de dos semanas de ingresos de Alphabet, señaló Reuters, y supone una minucia para una compañía con US$102.900 millones en caja. El mayor impacto, sin embargo, es el que supone en su modelo de negocio. La compañía ofrece Android y estas aplicaciones de forma gratuita, pero obtiene ingresos derivados de la publicidad asociada a su uso, un modelo de negocio que según los analistas genera ingresos publicitarios de unos 10.000 millones de euros (US$11.600 millones).
Alphabet ha basado su defensa en insistir en que los acuerdos con los fabricantes para usar Android y preinstalar sus aplicaciones son voluntarios, y tanto las marcas como los consumidores tienen libertad para desinstalar las herramientas de Google y descargar otras.
Magrethe Vestager, comisaria europea de Competencia, tiene encima de la mesa otra acusación contra Google por abuso de posición dominante. Hace dos años, la Comisión envió un pliego de cargos a la empresa estadounidense por prácticas contrarias a la libre competencia en el mercado de la publicidad online en webs se terceros.
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