Banco de España propone eliminar el salario mínimo para crear más empleo

La institución aseguró que, en el entorno recesivo actual, la reforma laboral no ha tenido aún ningún efecto visible en la contratación ni en los despidos. Sin embargo, sí encuentra otras consecuencias reseñables en los salarios y en la composición del mercado de trabajo.

Las últimas políticas laborales han buscado “la introducción de mayor flexibilidad en el proceso de determinación salarial”. Y se han notado. Los incrementos salariales acordados en los convenios disminuyeron hasta el 1,3% en diciembre de 2012, frente al 2,5% observado un año antes, mientras que los datos disponibles para 2013, aunque aún son poco representativos, indican moderación del incremento salarial medio hasta el 0,6% (frente a la inflación de mayo, que fue del 1,7%).

Además de la suavización salarial, existe una menor vinculación de los sueldos al IPC. “Este porcentaje, que se ha situado tradicionalmente entre 60% y 70%, ha descendido hasta 45% en 2012”, informa el organismo que dirige Luis María Linde. Esta cifra es aún menor en los nuevos convenios, que muchos fijan un límite de 2% o se vinculan a la evolución de la inflación europea. Así, aunque las perspectivas no son muy optimistas a corto plazo, el organismo asegura que “el patrón de mayor moderación salarial es un ingrediente fundamental para la reactivación de la economía española y, en particular, para favorecer la creación de empleo”.

Por ello, aconseja medidas adicionales que promuevan la creación de empleo a corto plazo y faciliten la flexibilidad de los salarios.