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Goldman Sachs advierte que el impacto sería de US$18.000 millones por cada 5% de arancel, mientras que analistas alertan una posible recesión mexicana y la violación al T-MEC
La economía mexicana no tuvo un buen desempeño en el primer trimestre del año, debido a que su PIB cayó 0,2 puntos porcentuales con relación al último trimestre de 2018, y no parece que en lo que queda de 2019 su suerte vaya a cambiar, pues todo apunta a que los aranceles de 5% a 25% anunciados por el presidente Donald Trump podrían llevar su economía a una recesión.
El impuesto que anunció el mandatario estadounidense se empezarían a aplicar a todos los productos exportados por México a partir del 10 de junio iniciando con un arancel de 5%, que se incrementará gradualmente hasta un 25% en octubre, hasta que el gobierno mexicano detenga el flujo migratorio ilegal desde Centroamérica hacia EE.UU., pues, solo en abril, 98.977 inmigrantes fueron detenidos en la frontera de 3.145 kilómetros que separa a estos dos países.
Según el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la Unam, la medida podría llevar a México hacia una crisis económica, debido a que afectaría la inversión fija bruta, la producción industrial y aumentaría la tasa de desempleo.
“Al segundo trimestre del año, la economía mexicana podría pasar de la desaceleración al estancamiento colocándose en la antesala de una posible recesión”, sostiene el coordinador del Lacen, Ignacio Martínez.
Un estudio citado por el The New York Times elaborado por Goldman Sachs, banco estadounidense que considera factible la implementación de las medidas impuestas por Trump, revela que los aranceles podrían afectar a la economía mexicana en hasta US$18.000 millones por cada 5% que aumenta el arancel. Esto significa que el impacto sería de US$36.000 millones, si se aplica 10%; y de hasta US$90.000 millones se ejecuta 25%.
Las medidas arancelarias que pretende implementar Trump a México incumplen el artículo 302 del Tlcan (ahora T-MEC), que sostiene que no se pueden imponer nuevos aranceles entre EE.UU., México y Canadá
Los efectos arancelarios están altamente concentrados a nivel de industrias y de territorios específicos, sobre todo, en las manufacturas que comprenden electrónica y autopartes
Esto se puede evidenciar en la relevancia que tienen las exportaciones de México a Estados Unidos, ya que los productos enviados al país administrado por Trump representan aproximadamente 80% de todas las exportaciones del país mexicano.
En 2018, las exportaciones de México a EE.UU. ascendieron a US$346.000 millones, de los cuales US$64.500 millones fueron de vehículos , US$49.800 de partes de automotores y US$26.600 millones de equipos de cómputo.
El sector que más se vería afectado sería el de la industria automotriz, ya que representa cerca de 33% de todas las exportaciones mexicanas. Por eso, la calificadora de riesgo Fitch Ratings alertó que compañías de este sector aumentarán su producción, pero desde EE.UU.
“Los efectos arancelarios están altamente concentrados a nivel de industrias y de territorios específicos, sobre todo en las manufacturas que comprenden electrónica y autopartes. Por eso, Guadalajara sería el territorio más afectado en términos de tecnología, mientras que Nuevo León, San Luis Potosí y Puebla, los más damnificados de la industria automotriz”, afirmó Samuel Ortiz, experto en economía mexicana y profesor de la Unam.
El otro lado de la balanza comercial son las exportaciones de EE.UU. a México, cifra que en 2018 sumó US$265.000 millones. Maquinaria, con US$46.000 millones; elementos electrónicos, con US$43.000 millones; y combustibles minerales, con US$34.000 millones; fueron los productos que más se enviaron.
Con relación al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (que será sustituido por el T-MEC), Martínez aseguró que la medida del presidente de EE.UU. viola el artículo 302 del ‘trato nacional’, que impide la imposición de aranceles entre EE.UU., México y Canadá. “Salvo que se disponga otra cosa en este Tratado, ninguna de las Partes podrá incrementar ningún arancel aduanero existente, ni adoptar ningún arancel nuevo, sobre bienes originarios”, reza ese artículo.
Según los expertos consultados por LR, el T-MEC se votaría en México entre julio y septiembre, y consideran que éste se aprobaría, ya que, Trump no aplicaría los aranceles, debido a que el acuerdo beneficia a EE.UU.
Al cierre de esta edición funcionarios mexicanos y estadounidenses reunidos en Washington no habían terminado la cita para conocer si se frenarían los aranceles a México. Mientras tanto, el presidente Andrés López Obrador ya tenía en sus manos la lista de los productos estadounidenses que podrían tener aranceles en retaliación por la decisión de EE.UU.
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