Eliminación de salvaguardias al acero también afectará ganancias de chatarreros

La decisión anunciada el martes por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, de mantener por un año más las salvaguardias para las importaciones del alambrón de acero liso provenientes de México y Trinidad y Tobago, impactará también las ganancias del gremio de comercializadores de chatarra de hierro y aceros.

Empresarios dedicados a la compra y venta de excedentes industriales aseguran que la libertad para la llegada de barras de acero, alambrón corrugado, perfiles (cuadrados y en L) y platinas, disminuirá el precio los productos ferrosos en unos $200.

“Se beneficiará a la construcción, pero bajará el valor de la chatarra porque entrarán muchos productos acabados a precios muy baratos”, dijo Rafael Naranjo Pérez, gerente de Excedentes y Metales. Esto repercutiría en las compras que hacen los productores nacionales de acero a los ‘chatarreros’.

Otro empresario consultado por LR, y quien pidió reserva de su nombre, calcula que la verdadera consecuencia de la disposición del Gobierno para los chatarreros se verá en el costo macro del producto: las toneladas. El valor actual de 1.000 kilos oscila entre $650.000 y $700.000; sin las salvaguardias, bajaría a $450.000 y $500.000.

Grandes y pequeños clientes
De acuerdo con la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), aún no se sabe cuántas firmas compiten en el mercado de la chatarra ferrosa. Varios son los factores, entre esos la sombra de la informalidad.

“El ferroso es un mercado diferente, con una informalidad muy alta. Nosotros estamos trabajando para formalizarlo”, manifestó, Javier Díaz Molina, presidente de la agremiación. Los principales clientes de la chatarra ferrosa son las grandes siderúrgicas, entre esas Aceros Diaco, Paz del Río, Sidenal, Prodeco y Sidoc. Estas firmas, según Naranjo Pérez, pueden comprarle al mes entre 40.000 y 50.000 toneladas a un almacenador. “Ahí es donde se verá el impacto, porque los precios van a bajar para los volúmenes de compra de esta industria”.

Los otros compradores son pequeñas fundidoras, 300 a 400 en el país, que están ubicadas en su mayoría en Antioquia, Cundinamarca, Santander y Valle del Cauca. “Adquieren de ocho a 10 toneladas mensuales; la diferencia es que compran poco, pero exigen calidad y por eso el kilo les cuesta entre $800.000 a $850.000”.

La calidad de la chatarra se entiende como la ausencia de óxido, pintura o mezclas con acero, debido a que esta se obtiene de neveras, carros, y hasta desechos de construcciones. Los defectos tratados en procesos como el troquelado por ejemplo, para ofrecer un producto apto para elaborar piezas pequeñas como piñones industriales.

Ferrosos no se afectan
Los precios del material no ferroso, en cambio, no serán perjudicados por la eliminación de las salvaguardias porque se maneja con metales diferentes como cobre, aluminio, plomo y estaño. Y, además, porque su principal mercado es el exterior: las exportaciones de desperdicios y desechos de fundición sumaron el año pasado US$39,5 millones. La mayoría no ferrosos con destinos principales en Asia y Europa, según el presidente de Analdex.

“Estas son las chatarras de mejor calidad, utilizadas para fabricar cables, ollas, tuberías, aviones, pesas y baterías. El kilo de cobre cuesta $13.000 y la tonelada, $13 millones” precisó el gerente de Excedentes y Metales.

Camacero dice que hace falta chatarra para producir acero
La Cámara Colombiana del Acero (Camacero) negó que el sector chatarra se vea afectado por la eliminación de las salvaguardias al acero. “A Colombia le hace falta chatarra para producir acero, es el principal cuello de botella de las cuatro siderúrgicas semi -integradas del país”, expuso un vocero de la agremiación en respuesta a LR. “El precio nacional de la chatarra es ficticio, pues los siderúrgicos siempre se han puesto de acuerdo para pagar la chatarra muy por debajo del precio normal, que es fijado por el precio internacional de la chatarra, que es el doble, y así bajar la demanda”, agregó.

Las opiniones

Javier Diaz Molina
Presidente de Analdex
“Las siderúrgicas en Colombia necesitan el no ferroso. La chatarra ferrosa sobra, por eso se exporta. Eso no ocurre con el hierro y el acero, que se requieren en las siderúrgicas”.

Andrés Ramírez
Director de Comunicaciones de Camacero
“Colombia consumirá la misma cantidad de chatarra pues no tiene como producir más y es por eso que es también deficitario en producción de acero y toca importarlo”.