Standard & Poor’s deja calificación de Colombia en BBB-, pero alerta por deuda externa

La agencia Standard & Poor’s ratificó ayer la calificación de Colombia en BBB- con perspectiva estable. La decisión se dio luego de que la firma estableciera que el perfil continuará mejorando no solo como resultado de una mayor inversión extranjera, sino también por un crecimiento en el PIB de 3,2% y una mejor gestión del gasto. Sin embargo, alertó por el efecto de las debilidades externas.

“La principal debilidad de las calificaciones de Colombia sigue siendo su perfil externo, en particular, su alta deuda externa y su débil liquidez, respaldada por la volatilidad de los términos de intercambio”, detalló el informe de la calificadora, que además explicó que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) mejorará por encima del de la región.

Este crecimiento, según la agencia, debería ayudar a estabilizar la carga de la deuda del Gobierno. No obstante, aseguró que podría “bajar la calificación en los próximos uno o dos años si la mejora proyectada en el perfil externo de Colombia no se materializa, o si el acceso al financiamiento externo del mercado se deteriora”.

Sobre la Ley de Financiamiento, S&P continúa esperando “el pragmatismo del Congreso y el Gobierno para aprobar e implementar políticas que garanticen la sostenibilidad fiscal y el crecimiento económico”.

“La calificadora confía que a final de año el Gobierno logre aprobar a la reforma, que sean pragmáticos en ese tema, y que de forma positiva el crecimiento de Colombia esté por encima de América Latina. Este mayor crecimiento ayudaría a estabilizar la deuda externa del Gobierno Nacional”, aseguró Julian Cortés, analista macroeconómico de la comisionista Alianza Valores.

El analista agregó que en el reporte no se menciona la posibilidad de que no pase la tributaria que está en el Congreso. Sin embargo, destacó, por ejemplo, que “Fitch no veía grave que no pasara la reforma tributaria porque para ellos estaría reduciendo los ingresos del Gobierno por la reducción del IVA e impuestos a empresas”. Frente a las expectativas de crecimiento para 2019 y 2020, la calificadora recalcó que en los próximos tres años se podría dar una aceleración económica si el Gobierno Nacional acelera la implementación de sus “ambiciosos programas de infraestructura como las 4G y el metro de Bogotá”.

“En materia de infraestructura, el Gobierno tiene las esperanzas de superar la cifra de 3%. Los desembolsos, por ejemplo, de la Financiera de Desarrollo Nacional han reactivado el sector en el último año, lo mismo pasa con las obras civiles que ha crecido en un buen ritmo”, explicó José Roberto Acosta, abogado y economista.

Entre otros de los desafíos que destacó el informe de S&P está la implementación del acuerdo de paz. Según el análisis, que haya una puesta en marcha efectiva del acuerdo podría contener riesgos políticos a largo plazo y aumentar la seguridad. Sobre la migración venezolana, advirtió que para un país con un alto desempleo y una alta informalidad, “integrar la gran cantidad de inmigrantes a la economía formal será una tarea lenta y difícil”.

Otro punto que resaltó la agencia fue la menor maniobrabilidad política que está teniendo el Gobierno en el Congreso e incluso habló sobre la baja popularidad del presidente Iván Duque. “Estas dinámicas políticas podrían generar una mayor incertidumbre en la implementación de la política económica en los próximos años (...) Dicho esto, los posibles retrasos o la incapacidad del Gobierno y el Congreso para aprobar e implementar reformas en los próximos años podrían llevarnos a reevaluar la efectividad institucional de Colombia”.

Es de resaltar que en mayo la calificadora Moody’s le dio un voto de confianza al desempeño de la economía colombiana al cambiar su perspectiva de negativa a estable, mientras que Fitch Ratings la rebajó de estable a negativa.