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Según el Dane, la desocupación juvenil llegó a 23,1% en ese periodo. Las ciudades con las mayores tasas fueron Florencia y Valledupar
Si bien el mercado laboral ha sido uno de los más golpeados por la pandemia, en la población juvenil la afectación ha sido más pronunciada. De hecho, el más reciente informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) evidenció que, 1,56 millones de jóvenes estuvieron desocupados en el trimestre de marzo a mayo de este año. Así, la tasa de desempleo juvenil en ese periodo se ubicó en 23,1%.
Aunque ese resultado significó una disminución de 3,3 puntos porcentuales frente al mismo trimestre del año pasado, el director del Dane, Juan Daniel Oviedo, explicó que, aún en medio de la reactivación, la tasa está por encima de los niveles que se registraron en el trimestre de octubre a diciembre del año pasado.
“Hemos tenido una estabilización de esta tasa de desempleo alrededor de 23%. Incluso, estamos por encima de niveles que encontramos en el trimestre móvil de octubre-diciembre del año pasado, donde veíamos una tasa de desempleo de 21,6%”, dijo Oviedo.
En la desagregación por ciudades, las tasas de desempleo juvenil más altas se registraron en Florencia y Valledupar, pues en ambas capitales la cifra se ubicó en 31,5%. Les siguieron Riohacha (29%), Cali (29%), Sincelejo (28,2%), Medellín (28,2%), Ibagué (28,1%) y Neiva (28,1%). En la capital del país, la tasa de desocupación fue de 26,3%.
Iván Jaramillo, investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, explicó que Florencia, Riohacha, Neiva e Ibagué son concurrentes en las mayores tasas de desempleo, por la ausencia de músculo de absorción de la oferta que va saliendo de jóvenes recién graduados.
“Tenemos una tasa de desempleo de 23,1%, que representa una ligera reducción de 3,5 puntos porcentuales frente a la tasa de 26,6% que observamos en el trimestre marzo-mayo de 2020”.
“Se dificulta porque a menor cantidad de puestos también es difícil que sean llenados por jóvenes que son egresados, dado que están ocupados por personas con bastante nivel de experiencia, lo que generalmente se prefiere en la demanda de trabajo”, dijo Jaramillo.
Cabe mencionar que durante este periodo de tres meses, solo en Quibdó se evidenció un aumento en la tasa de desempleo, pues pasó de ser de 21,9% entre marzo y mayo de 2020 a ser de 24,6% en el mismo trimestre de este año, con un aumento de 2,7 puntos porcentuales.
En cambio, en Popayán se registró la mayor caída en el desempleo juvenil. En la medición anual del Dane, el indicador se redujo en 16,8 puntos porcentuales, pues la tasa pasó de 42,8% a 26%.
Al desagregar las cifras, también se evidenció que, durante ese mismo trimestre móvil, hubo 5,2 millones de jóvenes entre los 14 y 28 años que estuvieron ocupados, mientras que 5,6 millones estuvieron en la inactividad.
La brecha de género es de 10,6 puntos
En el último reporte de mercado juvenil, el Dane informó que, entre marzo y mayo, hubo 734.000 hombres jóvenes desocupados, con lo que se registró una tasa de desempleo de 18,7% para este grupo poblacional. En cambio, en el caso de las mujeres, la tasa fue de 29,3%, pues se registraron 835.000 desempleadas. Con estas cifras, la brecha de género en el mercado laboral juvenil es de 10,1 puntos porcentuales.
“La brecha de género es preocupante, la tasa de desempleo de las mujeres jóvenes es de 29,3%, con a penas una reducción de 3,3 puntos porcentuales frente a la que se observaba en el año anterior”, dijo Oviedo.
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