En Semana Santa se van a cumplir dos años de la inundación que se produjo en el norte de Bogotá. La Universidad de la Sabana fue uno de los inmuebles más afectados, no solo por las pérdidas físicas, sino por el impacto que produjo. Ahora, este episodio se recuerda con cariño, ya que por este inconveniente, cuentan con tecnología de punta, y además, quienes tienen problemas similares acuden a la institución para obtener asesorías.