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sábado, 7 de octubre de 2017

Hoy en día el acceso a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) se ha convertido en un elemento indispensable para el desarrollo de las naciones, pues a través de estas se gesta innovación tecnológica, se dinamiza la economía y se ofrecen todo tipo de servicios a los ciudadanos.

Precisamente por esto, la ONU, la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y otras organizaciones internacionales colocan sus mejores esfuerzos para cerrar la llamada brecha digital. Esta se refiere a las desigualdades socioeconómicas que surgen entre las comunidades por las diferencias en el acceso a TIC y dispositivos tecnológicos, ya que las comunidades con menor acceso tienen menores índices de desarrollo por no poder utilizar plenamente los beneficios de estas.

Por esta razón, la ONU y todos los países del mundo se han puesto la tarea de superar la brecha digital como camino para alcanzar los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) proyectados para 2030, dentro de los cuales el acceso a TIC es clave para enfrentar y superar las desigualdades socioeconómicas presentes en países en vías de desarrollo.

Al respecto, hace pocas semanas en Colombia se expidió el Decreto 1515 de 2017, por medio del cual se reglamentó la exclusión de IVA para los dispositivos móviles inteligentes, es decir, tablets y smartphones. Esta norma determinó que están excluidos de IVA los dispositivos con valor menor a 22 UVT (alrededor de $701.000). Así se busca avanzar en la promoción del acceso de los colombianos a dispositivos inteligentes y TIC. Sin embargo, el Decreto se queda corto ante lo que podría haber sido, si excluyera todos los dispositivos móviles inteligentes sin importar su valor comercial. La razón es sencilla, los dispositivos de tecnología de punta tienen funciones y aplicativos que hacen que sus precios superen las 22 UVT y a su vez, incluyen un sin número de oportunidades en términos de acceso a TIC, por lo que aumentan las capacidades de los usuarios a la hora de usarlas. Es decir, mayor precio casi siempre es sinónimo de mejor tecnología y un acceso más eficiente a TIC.

Por otro lado, las decisiones en la compra de dispositivos también afectan el despliegue de infraestructura de nuevas tecnologías. Los dispositivos de tecnología más avanzada (hoy en día 4G y en unos años 5G) tienen costos más altos, que unidos a impuestos más elevados, pueden disuadir a los consumidores de adquirirlos. Entonces, hay una menor demanda de servicios de tecnologías más avanzadas (4G y 5G), que se traduce en menores incentivos para que los Operadores inviertan en infraestructura para estas.

Para que Colombia zanje las desigualdades generadas por la Brecha Digital y garantice desarrollo nacional a través de las TIC es fundamental que el Gobierno promueva el acceso a tecnología de punta. Desafortunadamente, esta exclusión de IVA se queda a medio camino de su fin y se vuelve aún más limitada pues la Reforma Tributaria aumentó los impuestos para el internet móvil. Pues si bien algunos dispositivos van a ser más baratos, el internet móvil necesario para usarlos va a ser más caro, lo que deja la situación en tablas.

Aunque es loable la intención del Gobierno de excluir de IVA algunos dispositivos móviles inteligentes, esta no es suficiente, sobre todo cuando paralelamente se aumentaron los impuestos para el internet móvil. Por esto, es necesario tomar una posición más decidida e implementar medidas más profundas y certeras que permitan al país enfrentar la brecha digital y unirse a la lucha global por los Objetivos del Desarrollo Sostenible.