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  • Germán Corcho Tróchez

lunes, 13 de enero de 2014

El procurador general Alejandro Ordóñez no aceptó la recusación interpuesta en su contra por la defensa del alcalde mayor de Bogotá, Gustavo Petro Urrego. Con esto, conocerá la reposición presentada contra el fallo con el cual lo destituyó del cargo e inhabilitó por 15 años para ejercer funciones públicas. 

Los abogados del burgomaestre habían pedido al jefe del ministerio público que se alejara del caso y no conociera de la reposición presentada. En su solicitud del 31 de diciembre, recusaron a Ordóñez porque consideran que “tiene un interés directo en la actuación disciplinaria” y ha manifestado su opinión en relación con la respuesta de su despacho a la reposición.

La decisión de primera instancia tiene de fondo la investigación disciplinaria que Ordóñez hizo a Petro, por presuntos malos manejos en el cambio del modelo de aseo del Distrito Capital colombiano.

En la mañana de hoy lunes se conoció, sin embargo, que el Procurador rechazó los 17 argumentos en los que se basó la recusación. Ordóñez considera que no existe razón para declararse impedido porque  no hay un vínculo personal o una enemistad probada que lo aleje del debate jurídico.

Bajo ese concepto, requerían además que se nombrara un procurador ad hoc, que no sea subalterno de Ordóñez y garantice la transparencia del proceso. Pero esta solicitud también fue negada, debido a que la figura no existe.

Esta es la tercera recusación de Petro que faltaba por ser resuelta. La viceprocuradora, María Eugenia Carreño, y los procuradores de la Sala Disciplinaria ya habían rechazado el requerimiento para declararse impedidos. Según Petro y sus abogados, debían hacerlo porque actuaron con parcialidad a la hora de emitir el fallo que lo deja sin derechos políticos.

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