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  • Reuters

viernes, 22 de septiembre de 2017

En total, la misión recibió 8.994 armas y más de 1,7 millones de municiones de diferentes calibres

La misión de las Naciones Unidas en Colombia concluyó el viernes sus actividades de recepción e inhabilitación del arsenal que entregaron las Farc, parte del acuerdo de paz con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos para acabar con un conflicto interno de más de medio siglo en el país sudamericano.

La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) firmaron con Santos en noviembre del 2016 un acuerdo para silenciar los fusiles y poner fin a una confrontación que ha dejado más de 220.000 muertos y millones de desplazados.

Las Naciones Unidas aprobaron el envío de una misión de 450 observadores a Colombia que supervisó el cese bilateral y definitivo del fuego entre las partes y que se encargó de recibir las armas de las Farc para su posterior destrucción.

"Confiamos que la finalización de la dejación de armas no sea también el fin de los esfuerzos de paz, sino que al contrario, sea la señal de su relanzamiento", dijo el jefe de la misión de la ONUen Colombia, Jean Arnault, al declarar el fin de actividades.

Arnault y el presidente Santos presenciaron en las afueras de Bogotá con el proceso de inhabilitación de las últimas armas entregadas por las Farc, que se fundirán para construir tres monumentos a la paz que se levantarán en Colombia, Cuba y en la sede las Naciones Unidas, en Nueva York.

"Todas estas armas que fueron utilizadas durante tanto tiempo para destruir vidas, ahora serán un monumento conmemorando la paz y la vida. Es un cambio histórico de 180 grados, de una situación a la otra", dijo Santos.

En total, la misión de la ONU recibió 8.994 armas y más de 1,7 millones de municiones de diferentes calibres. Una segunda misión de la ONU conformada por 120 observadores internacionales sin armas empezará sus actividades en Colombia el próximo martes para verificar el proceso de reintegración a la sociedad de los excombatientes de las Farc.

Unos 7.000 combatientes de las Farc dejaron las armas como parte de la implementación del acuerdo de paz y conformaron un partido político como uno de los primeros pasos para su reincorporación a la sociedad.

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