• Colprensa

miércoles, 22 de enero de 2014

Tras las denuncias presentadas por Marcha Patriótica, en cuanto al asesinato de varios de sus integrantes y las amenazas constantes, la comisión negociadora de las Farc también expresó su respaldo al movimiento y reclamó al Gobierno mayores garantías a la oposición.

Las Farc interpretaron estos hechos como “una pésima señal que sigue minando la confianza en la palabra del Gobierno” y una prueba más de que “se desconoce el derecho a la opción política y se sigue exterminando a los activistas políticos, y de organizaciones sociales y populares”.

Por esta razón urgen al Gobierno para que “detenga el ‘viacrucis’ de la Marcha Patriótica” y reiteraron que para que se sostenga el proceso de paz debe haber verdaderas garantías políticas y de seguridad para los movimientos sociales y políticos del país.

Además pidieron que el Estado no guarde silencio sobre el tema como, “lo hizo de manera sistemática durante los años 80 y 90 cuando se ejecutaba el genocidio de la Unión Patriótica” en el que murieron cientos de sus militantes por todo el país.

Rechazan enfáticamente que el Gobierno los inste a “cambiar balas por votos”, cuando los campesinos que protestan son reprimidos “como parias con las banderas de la soberanía plegadas, tiradas en el suelo”.

También critican que a los integrantes de la Marcha Patriótica se les judicialice porque “los asesinatos de líderes sociales y populares siempre tuvieron en Colombia un comienzo con la denominada judicialización, pero después terminaron muertos”.

Por esta razón concuerdan con una frase pronunciada por el fiscal, Eduardo Montealegre, cuando éste dijo que “el gran desafío del posconflicto va a ser la guerra sucia” y piden al Gobierno desplegar “acciones convincentes para frenar operaciones sanguinarias como la del tristemente célebre ‘Baile Rojo’ que exterminó a un movimiento y que ahora pretende aplicarse a la Marcha Patriótica”.