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  • Ana María Bedoya Jiménez

sábado, 3 de noviembre de 2012

El servicio de ‘conductor elegido’ que prestan las aseguradoras y las empresas privadas, ha venido creciendo durante los últimos años, sin embargo, se evidencian grandes dificultades en cuanto a la regulación de las compañías privadas y la saturación de las firmas aseguradoras.

Por ejemplo, no hay una entidad que en este momento regule el funcionamiento de las empresas y los usuarios no conocen a dónde acudir en el caso de algún tipo de queja o reclamo. En la Superintendencia de Industria y Comercio no existe hasta el momento ninguna denuncia acerca de la prestación del servicio de conductor elegido. No obstante, la entidad indicó que es a sus oficinas donde se deben dirigir todas las dudas y reclamos.

“No se necesita ningún abogado, el trámite es ágil y fácil para cualquier consumidor y así nuestra oficina general se encuentre en Bogotá, estamos en la capacidad de recibir las quejas en todo el país”, aseguró la entidad.

De acuerdo con José Matis, gerente de Ángel de Ruta, una de las empresas pioneras en este servicio, en Colombia todavía no existe una norma que reglamente la actividad de conductores elegidos.

“Nosotros tenemos los conceptos jurídicos con el aval del Ministerio de Transporte y la Secretaria de tránsito de ese entonces, como las herramientas en las cuales nos basamos para poder constituirnos como una empresa totalmente legal y para soportarnos en caso de que en un futuro piensen en declararlo ilegal”, aseguró.

Así mismo, advirtió que esta actividad se debe reglamentar con el tiempo y que como pioneros siempre deben dar ejemplo de legalidad.

De otro lado, los prestadores que le sirven como outsourcing a las aseguradoras, se han quejado de lo poco que les pagan por cada uno de los servicios. Mientras ofrecer este servicio de manera particular vale en zona urbana de Bogotá entre $50.000 y $70.000, en las afueras de la ciudad oscila entre $80.000 y $100.000 dependiendo el destino, las aseguradoras les pagan entre $35.000 y $40.000 por servicio urbano y $57.000 en los lugares aledaños.

Orlando Parra, gerente de El Conductor Elegido explicó el abismo entre tomar un servicio particular y tomarlo por la aseguradoras. Cabe resaltar que con la aseguradora, esta asistencia va incluida dentro del pago del seguro, es la empresa la que desembolsa su valor a la compañía de conductor elegido.

El costo del seguro del automóvil depende de varios aspectos, entre ellos, la marca, tipo, nacionalidad del vehículo y la experiencia siniestral del asegurado. Todas las compañías tienen características diferentes en el manejo del conductor elegido.

Por ejemplo, en la Equidad Seguros, ofrece un servicio ilimitado pero exclusivamente a las personas que tienen la póliza de Autoplus; en póliza “Vehículos Bolívar”, el usuario tiene derecho a solicitar el servicio cuatro veces por mes. En la actualidad, están prestando más de 2.500 servicios mensuales con la póliza que se llama “regreso seguro a casa”. Así mismo, en Mapfre Seguros la asistencia es ilimitada y se debe pedir como mínimo con cuatro horas de anticipación.

Para Jaime Eduardo Herrera, subgerente comercial de Mapfre Manizales, el servicio de conductor elegido está incluido dentro de la asistencia, o sea que el costo del conductor elegido está inmerso dentro de la póliza.

Adicionalmente explicó que las condiciones para ofrecer el servicio es que la póliza esté vigente y que el pago esté al día, el servicio se debe solicitar mínimo con cuatro horas de anticipación. Desde el momento que se llame a pedir el servicio, el usuario debe especificar dónde lo recogen y a qué dirección lo tienen que llevar, “esa ruta no se puede modificar”, aclaró.

En Mapfre si se adquiere un Renault Clio 2008, la póliza le cuesta alrededor de $900.000 y con este seguro, el usuario puede pedir de manera ilimitada el servicio.

Esta opción, la están ofreciendo la mayoría de aseguradoras del país, entre ellas Equidad Seguros, Chartis, Liberty, entre otras.

No obstante, Orlando Parra manifestó su preocupación por el hecho de que este servicio se esté ampliando de manera indeterminada.

“Lo que se esta viendo es que como tal el servicio de conductor elegido es una carga para las aseguradoras. Las compañías de seguros no dimensionaron la situación de ofrecer este servicio y hasta donde iba a llegar. Está sobredimensionado y salido de cause. El fin de semana de Halloween no hubo cómo poder cumplir con todas las necesidades de los usuarios de las aseguradoras”.

Sin embargo, Herrera aclaró que lo que las aseguradoras como Mapfre buscan es el volumen y que en el momento en el que sientan que esta actividad no es rentable, tendrán que limitar las pólizas. “Nosotros a lo que jugamos es al volumen de clientes, las compañías aseguradoras bajamos las tarifas para captar clientes, en algún momento cuando haya una gran demanda, tendremos que subir las tarifas. Así mismo pasará en este caso, nosotros ahora por el mercado lo tenemos abierto, llegará el momento que si vemos que no es rentable lo limitaremos”, agregó.

En cuanto a los seguros de automóviles y los servicios adicionales que ofrecen las aseguradoras, Carlos Varela, director de la Cámara de Automóviles de Fasecolda, recomendó a los usuarios verificar si el seguro que poseen cuenta con el servicio de asistencia y pedir asesoría de cómo pueden utilizarlo. “Existen productos en donde se requiere que la persona avise con al menos 24 horas de anticipación y otros con al menos dos o tres horas, informando a dónde va a estar, cuándo debe presentarse el conductor y el lugar de destino. Casi todos estos servicios permiten sólo un trayecto, es decir, desde el origen se conduce hasta sólo un destino dentro del área metropolitana”, puntualizó.

De otro lado, en cuanto al difícil tema de quién responde en el momento que ocurra un accidente, en el caso de empresas que prestan el servicio a la aseguradora, ellas deben tener una póliza de responsabilidad civil, en el caso de que ocurra un accidente y la responsabilidad es del ‘conductor elegido’, es la empresa aseguradora quien responde y posteriormente envía la cuenta de cobro a la empresa prestadora del servicio. Cuando se utiliza el servicio con una empresa particular, y si hay accidente, la empresa particular concilia con el usuario para que use su seguro y se le paga el excedente. Las empresas privadas al no tener una entidad que las vigile, corren el riesgo de que se creen competencias ilegales.

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