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Estos procesos en el sector agropecuario determinan los terrenos con mayor capacidad productiva para usos agrícolas, pecuarios y forestales. También se identifican los suelos que se inundan, esto es importante, porque si son de producción, usted debe saber que siempre en estas áreas, en ciertas épocas del año, el agua recuperará esos espacios que en teoría no estaban cubiertos.
Así, el estudio de suelos es la primera inversión que todo empresario debe realizar porque dada la biodiversidad del país los suelos son muy distintos y usted debe saber qué características tiene la tierra en la que contempla realizar su actividad agrícola o pecuaria, para saber a ciencia cierta el presupuesto que debe destinar y que esta sea adecuada.
Por ejemplo, a partir de un buen estudio de suelos usted puede conocer variables importantes como si es necesario o no neutralizar la acidez; hacer enmiendas nutricionales para que, según la especie que vaya a sembrar, pueda suministrarle los insumos requeridos reconociendo exactamente qué elementos debe aportarle al suelo como fósforo, nitrógeno y/o potasio; evitar la inundación o suministrar más agua porque el suelo no la retiene.
Muchas entidades privadas y públicas hacen esta evaluación de tierras con fines productivos, como Corpoica, el ICA y algunas universidades; lo más importante es que cuenten con análisis de laboratorio, en el país hay 23 de estos acreditados. Si está agremiado, su gremio puede contratar los servicios de la Upra para realizar estudios de aprovechamiento. El costo de un estudio depende del nivel de detalle y el tamaño del terreno, entre más detallado sea y menos hectáreas tenga, mayor será el costo, por cada una.
Las opiniones
Germán Darío Álvarez
Subdirector de agrología del IGAC
“Los estudios de suelo del igac sirven para identificar zonas con potencialidad productiva y no entrar en zonas con capacidad limitada”.
Felipe Fonseca
Dir. de la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria
“De 114 millones de hectáreas que tiene el país, 22 millones tienen vocación agrícola, es decir, mejores suelos para producir alimentos”.