El imperio contrataca

Hace un par de años, en este mismo espacio, explicaba los detalles preliminares de lo que se ha consolidado como una oferta formal al mercado del consumo de video por demanda. En aquel escrito “Walt Disneyflix” se podía ver algo de lo que ha venido sucediendo durante meses y ahora es una realidad, únicamente para los consumidores norteamericanos inicialmente. Disney ha develado el precio sorpresivo de US$6,99 mensuales para consumir contenido de video de alta calidad por internet para hogares, tabletas, móviles y otros dispositivos. Recordemos que la suscripción mensual de Netflix básica esta por US$9 mensuales. Parece que ahora se acabó el monopolio.

Las cifras oficiales de cierre del primer período trimestral de 2019 arrojan datos positivos para Netflix. Como compañía, tuvo un aumento significativo de número de suscriptores, para llegar a una sólida base de 150 millones de cuentas pagando por el acceso a su plataforma. La tendencia de Netflix viene así, comparando trimestres similares: crecimiento de 40,4% en el primer trimestre de 2018 y crecimiento de 22,2% en el primer trimestre de 2019. Cuando se supo del anuncio con los detalles del precio mensual que da acceso a los contenidos de Disney, el mercado financiero reaccionó a la baja haciendo que la acción de Netflix cayera en total unos US$8.000 millones a nivel de capitalización bursátil. No es saludable perder 5% del valor de la compañía en una sola jornada en bolsa. Por su parte, Disney, que también cotiza en bolsa, aumentó en la misma jornada 11,5%, logrando un salto rápido e inesperado en su nivel de capitalización bursátil. Primer ataque de los Sith.

El movimiento a la baja en un día, se puede recuperar en el mediano plazo, ya que tendremos que esperar el contrataque y la oferta que seguro preparan. Es complicado caer en números rojos ahora que están a la caza varias empresas de video como Amazon, Apple y Disney. Los directivos, acostumbrados a la irreverencia del mundo corporativo actual, dieron una bienvenida a sus competidores llena de mensajes entre líneas. El comunicado de Netflix invoca el lado oscuro de la fuerza: “Recientemente, Apple y Disney desvelaron cada una su servicio de suscripción de video directo al consumidor. Ambas compañías son marcas de primera clase a nivel mundial y estamos entusiasmados de competir con ellas; los primeros beneficiados serán los creadores de contenido y los consumidores, que obtendrán la recompensa de tener muchas compañías intentando proporcionar una gran experiencia de video a sus audiencias.”

Disney puso la carne en el asador después de años de ensayos, fusiones, adquisiciones y diseño de la estrategia. Tienen la “estrella de la muerte”. Ya se habla de tres nuevas producciones de Marvel Studios, una nueva “Frozen”, una nueva “Toy Story” y dos documentales de National Geographic. Por el lado de las series propias, una de las fortalezas de Netflix, se supo de series basadas en Star Wars, entre otras 50 series propias en los próximos cinco años. Las películas propias las lanzarán en la plataforma antes que en los cines. Habrá un catálogo de 10.000 capítulos disponibles y cerca de 620 títulos de películas individuales sobre las que adquirieron derechos. Que la fuerza los acompañe y que ojalá todos estos movimientos resulten en beneficio del entretenimiento, manteniendo la calidad de los contenidos y con buenos precios para los consumidores. Un verdadero Imperio al contrataque.