Zapatero a tus zapatos para el Emisor

El nuevo gerente general del Banco de la República, Juan José Echavarría, recientemente posesionado en el cargo, emprende un difícil camino por preservar la independencia del Emisor, una de las principales joyas de la Constitución del 91, que le arrebató de las manos la imprenta de billetes y el manejo de tasas a los presidentes de turno, y le dio el imperativo de mantener el poder adquisitivo de los colombianos atajando las presiones inflacionarias, a través del uso exclusivo de herramientas monetarias como los tipos de interés, entre otras. Pero en términos de independencia, las cosas tienen tanto de largo como de ancho y puede verse afectada cuando la banca central empieza a meterse en los terrenos del Ejecutivo, especialmente en labores que le conciernen al Ministerio de Hacienda. Ayer por ejemplo, el Gerente dijo que “la economía colombiana puede crecer por lo menos 3,3% si no se hacen reformas. Con reformas a 4%; se tienen que volver a hacer estas y el Banco de la República va a ayudar a la recuperación en la medida en que la inflación se comporte como queremos”. Echavarría comentó que hay una lista muy larga de reformas económicas: la pensional, que es “importante, porque tiene que ver con el ahorro de los colombianos y con la mala asignación de subsidios”. También dijo que hay otras de carácter comercial, una en el campo y otra laboral. Todas -según él- para abrir el comercio, incentivar el agro, aumentar el nivel de competencia, elevar el nivel de productividad y bajar la tasa de desempleo, que es de las más altas de América Latina. Toda una diatriba de ministro de economía. “He venido hablando hace muchos años. Porque hay que abrir la economía para competir”, dijo.

Hacía muchos años que no se oía hablar a un gerente del Emisor de esta manera; nunca Francisco Ortega, Miguel Urrutia o José Darío Uribe se metieron abiertamente en los terrenos políticos de la cartera de Hacienda o de Planeación Nacional, ni mucho menos se atrevían a comentar o recomendarle al Congreso qué hacer en su agenda de iniciativas de leyes económicas. Este nuevo camino que está tomando el Emisor de Echavarría puede llevar a un choque de trenes, tal como el que vive permanentemente la justicia en el que las cortes se pelean entre ellas desintitucionalizando uno de los poderes más neurálgicos. Lo enfatizamos porque ya en una rueda de prensa, el ministro Mauricio Cárdenas le pidió a Echavarría bajar más las tasas de interés para que ayuden a reactivar la economía, a lo que el Gerente le contestó que en Colombia la banca central era independiente. Un choque de trenes económicos es lo último que le puede pasar al país, pues en términos generales desde 1991, ha sido una política económica bien llevada desde el Ejecutivo y en la que el Emisor hace su tarea alejada de cualquier ambición de gobernar o manejar al Congreso. Con este proceder de dictar cátedra política en materia de reformas económicas, la alta gerencia del Emisor despierta a su gran controlador y vigilante que es el Congreso de la República que le recibe sus informes de gestión por legislaturas.

Hay que preservar la independencia del Banco de la República de toda intromisión del Ejecutivo, así el Presidente ponga a los codirectores que a su vez eligen al gerente general, pero más aún hay que estar atentos a los intereses polítiqueros que se pueden incubar en la banca central.