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jueves, 28 de mayo de 2015

Aquí la manera en que se recaude el dinero puede cambiar y por tanto tener importantes implicaciones legales. Las donaciones, compraventas o venta de instrumentos financieros son muy diferentes.

El crowdfunding es un fenómeno que tiene un gran impacto actualmente en el mundo y está cada vez más presente en Colombia.

Muestra de esto  es que en durante el año 2014 se aportaron cerca de 62 millones de euros a proyectos españoles vía crowdfunding, un 114 % más que en 2013, cuando la cifra ascendió a 29 millones de euros.

En la literatura especializada internacional se ha llegado al consenso de que el crowdfunding se puede estructurar de tres formas diferentes: (i) el altruista que conlleva  donaciones, (ii) la compraventa de cosas futuras o Pre-purchase que implica la existencia de una “recompensa” por el aporte que se haga a la financiación del proyecto, y (iii) el crowdinvesting donde se espera obtener rentabilidad del dinero que se aporta para el desarrollo del proyecto, incluyendo el equity crowdfunding y crowdlending.

El crowdfunding altruista no implica mayores consideraciones, a menos que se sobrepasen los límites que exigen insinuación en algunas donaciones.

Para evitar que se presenten nulidades en las donaciones por la falta de requisitos formales, las plataformas de crowdfunding pueden imponer restricciones en los aportes que hagan las personas para que se ajusten a los límites donde no se requiere insinuación o escritura pública.

En segundo lugar, el modelo Pre-purchase de crowdfunding, se adapta al modelo de compraventa de cosa futura, es decir el colaborador como compensación a su aporte recibirá en el futuro algo que se desprenda del desarrollo del proyecto.

En tercer lugar, el crowdinvesting puede ser usado para la venta de acciones (Equity Crowdfunding) o de bonos (Crowdfunded Lending), que lamentablemente tiene grandes restricciones en Colombia.

Los antecedentes en derecho comparado demuestran que es posible flexibilizar estas normas para permitir que las iniciativas sociales, la innovación, la cultura y el emprendimiento tengan una nueva forma de financiación.

En este sentido, Colombia puede seguir el camino de Estados Unidos con el JOBS Act de 2012, Francia con la Ordinance No. 2014-559 de 2014 o España con la Ley 5/2015 de fomento de la financiación empresarial. Regulaciones que han logrado proteger a los inversionistas al mismo tiempo que ofrecen una nueva alternativa de financiación para los emprendimientos.

Permitir que en Colombia se desarrolle el Equity Crowdfunding y el Crowdfunded Lending implica un movimiento audaz para hacerle frente a los nuevos retos de la economía global mediante el uso de nuevas tecnologías y abriendo espacio a los jóvenes.  

En particular en Colombia se ha usado el negocio fiduciario para adaptar la idea básica del crowdfunding, en su modalidad de crowdinvesting a la legislación colombiana.

Particularmente la fiducia inmobiliaria ha permitido que se puedan desarrollar varios proyectos mediante los aportes de muchas personas, que reciben como contraprestación derechos fiduciarios. Este mecanismo permite distribuir entre los inversionistas los beneficios económicos que se generan en el desarrollo del proyecto inmobiliario.