lunes, 20 de junio de 2016
AL le muestra que fue lo bueno, lo malo y lo feo de este lapso y cuáles serán las principales iniciativas que marcarán la agenda de tercer periodo legislativo que inicia el próximo 20 de julio de 2016.
Lo bueno
Para Julio Sampedro, decano de la facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Javeriana, lo positivo de esta legislatura es que se lograron sacar adelante los proyectos pertenecientes al llamado ‘paquete legislativo para la paz’. “La luz verde, por parte de los congresistas, al Acto Legislativo 04, el plebiscito y la modificación de la Ley de Orden Público 418 es fundamental para implementar lo acordado en la mesa de negociaciones y por tanto, son buenas noticias para el país”, dijo Sampedro.
Por su parte, Hernán Olano, Doctor Magna Cum Laude en Derecho Canónico resaltó la aprobación de la reforma al Código de Policía. “Aunque tiene artículos polémicos era necesario un nuevo Código de Policía que se ajuste a las nuevas realidades de Colombia”, dijo Olano.
Y agregó, que la aprobación de la marihuana medicinal, la Ley del primer empleo, la eliminación del cobro prejurídico en los créditos que otorga el Icetex a los estudiantes y la prima a trabajadoras domésticas, “son temas necesarios para el bienestar de los ciudadanos”, enfatizó.
Juan Manuel Charria Segura, especialista en Derecho Constitucional, algo positivo aunque polémico porque casi se hunde, es que se logró salvar el proyecto que busca endurecer las sanciones para los parlamentarios ausentistas y se consiguió el aval de la Corte Suprema de Justicia para descongestionar la sala laboral de la entidad. “Son dos normas necesarias para mejorar la eficacia de la justicia colombiana”, dijo Charria Segura.
La aprobación de la Ley de ‘Cero a Siempre’, la donación de órganos y la eliminación de multas en tiquetes aéreos son también los puntos fuertes que pasaron por surtieron en la reciente legislatura.
Lo malo
Según el senador por Alianza Verde, Navarro Wolf, la lista negra que empañó la legislatura la encabeza el hundimiento de la ley de Transparencia Legislativa, la cual buscaba que los congresistas rindieran cuentas. “Ese era un proyecto que debía salir porque le daba más transparencia al Congreso y a sus parlamentarios, sin embargo, los intereses encontrados no dejó que prosperaba”, aseveró Wolf, quien también lamentó el hundimiento de la ley de seguridad social de los taxistas.
Para Charria Segura, sin duda, lo más malo de la legislatura es la falta de oposición que actualmente tiene Gobierno. “Únicamente hay oposición por parte del Centro Democrático y un poco del Polo con Robledo, de resto no hay un control político fuerte, necesario para la democracia de una nación”, dijo el constitucionalista.
Lo feo
Conforme con Juan Fernando Córdoba, decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Sabana, lo feo de esta legislatura fue el ausentismo crónico que vivieron algunas plenarias del Congreso. “Eso no puede ocurrir y por ello es necesario que se apruebe la ley que busca poner en cintura a los parlamentarios”, enfatizó Córdoba.
Así mismo para el decano, la polarización entre las bancadas del Centro Democrático y el Gobierno y el bajo nivel en que se estaban discutiendo los proyectos son otros aspectos feos que deja un sinsabor en la gestión. “Por los congresistas que están esperábamos que el nivel de discusión de los proyectos fuera más alto pero sigue habiendo ataques entre ellos, sin respeto alguno”, dijo.
Lo que viene
Dos temas serán los centros de la próxima legislatura: la reforma tributaria y todas las iniciativas relacionadas con el desarrollo de los acuerdos de La Habana tras la refrendación en el país como desarrollo agropecuario y reformas a la participación política.
Las opiniones
Julio Sampedro
Decano Facultad Ciencias Jurídicas U. Javeriana
“La luz verde por parte de los congresistas al Acto Legislativo, al plebiscito y a la modificación de la Ley de Orden Público, fue lo mejor de la legislatura porque el país quiere la paz”.
Juan Fernando Córdoba
Decano Facultad de Derecho U. de la Sabana
“Lo feo del período legislativo fue el ausentismo crónico que vivieron algunas plenarias del Congreso. De ahí, la importancia que sea aprobada la ley que busca sanciones por no asistir”.
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