La locomotora de la vivienda y el agua crecerá a tasas de dos dígitos en el segundo semestre del año y será el sector que mayor contribución hará al crecimiento del PIB. Los principales indicadores de la construcción de edificaciones con corte a junio de 2013 muestran niveles sin precedentes en el contexto nacional. Se han alcanzado máximos históricos en licenciamiento, iniciaciones, ventas de vivienda y desembolsos de créditos hipotecarios.
En cuanto a la construcción de obras civiles e infraestructura, el componente más dinámico del Indicador de Inversión en Obras Civiles del Dane, fue el rubro de acueductos y alcantarillados, que creció 3,9% frente al segundo trimestre de 2012.
La anterior cifra refleja la ejecución de una política pública la cual permite que 2,5 millones de colombianos cuenten por fin con los servicios de agua y saneamiento, como son los casos de Quibdó, Bahía Solano, Carmen de Bolívar y María La Baja, entre otros. Actualmente, contamos con 966 proyectos en ejecución en este sector con una inversión de $4,1 billones en 508 municipios, que permiten proteger 104.590 empleos directos.
Estamos dándole la vuelta al mercado y por primera vez en el país se construye más VIS que No VIS. Según el Dane, durante el segundo trimestre de este año, el licenciamiento de Vivienda de Interés Social alcanzó una participación de 54% del total. De acuerdo con el Censo de Edificaciones, en este mismo período las iniciaciones de vivienda de interés prioritaria crecieron a una tasa récord de 156% anual.
El salto en la producción de vivienda prioritaria ha elevado los niveles de actividad edificadora en regiones históricamente rezagadas en este frente como Montería, Cúcuta, Popayán, Pasto, Cartagena y Barranquilla, y es justamente en esas ciudades donde mayor ha sido el impacto sobre la generación de empleo.
El aporte de la construcción de edificaciones al crecimiento del PIB y el empleo en Colombia sería mayor de no ser por la fuerte contracción de la actividad edificadora en Bogotá, que en la última medición reportaba una caída de 40.000 puestos de trabajo en el sector.
Con el Programa de las 100.000 viviendas gratis cumplimos con el propósito de construir más viviendas y de mejor calidad para los colombianos más pobres. Es la primera vez que el Subsidio Familiar de Vivienda se aplica el mismo año de su asignación, convirtiéndose en un verdadero canal de crecimiento y movilidad social. Pronto entregaremos la vivienda número 10.000 y seguiremos dando prioridad a los hogares en situación de desplazamiento, con lo cual cumplimos con el ofrecimiento de atender prioritariamente a la población más vulnerable.
El otro gran impulso al crecimiento de la construcción de edificaciones proviene del subsidio a la tasa de interés, con el que hemos disminuido el costo del crédito hipotecario para los hogares colombianos, estimulando las ventas y los desembolsos de cartera. A la fecha, cerca de 55.000 familias han obtenido créditos con subsidio a la tasa para adquirir viviendas por $3,8 billones.
Las cifras hablan por sí solas. Cada vivienda entregada y cada acueducto construido hacen que nuestro sector sea el principal jalonador del crecimiento económico y reflejan una política social responsable y en la línea de construir un país cada vez más justo.
