Hay seis bancos que tienen programas para incentivar el ahorro en los niños

Estos planes requieren de una inversión inicial de entre $0 y $100.000 y está dirigido a edades entre 0 y 17 años. 

Según datos de Asobancaria, en Colombia, cerca de 1,2 millones de niños y jóvenes tienen una cuenta de ahorros, es decir, 8% de la población colombiana menor de edad. Jonathan Malagón, vicepresidente de la entidad, considera que incentivar el ahorro y educar financieramente a los niños debería ser un eje fundamental de la política pública.

“Este incentivo al ahorro permite que en un futuro se puedan enfrentar contingencias, acumular mayores activos, acceder al sistema financiero y, en general, a tener unas finanzas personales saludables”, agregó.

Carlos Castro, profesor de la facultad de Economía de la Universidad del Rosario, explicó que existe un déficit general de la ciudadanía con respecto al ahorro y, por eso, hoy en día la educación financiera es muy importante, no solo para los niños sino para las personas en general.

En cuanto al rol de las instituciones financieras, Santiago Rodríguez, PhD en Finanzas, aseguró que los productos dirigidos a los niños ayudan a crear una cultura de ahorro, pero, “es importante es que las instituciones ayuden a educar financieramente a los niños y no solamente los vean como futuros clientes”.

Castro coincidió con esta posición y agregó que los programas de ahorro para niños son un canal que genera ciertas suspicacias. “Para las instituciones financieras es bueno generar una cultura del ahorro para hacer una fidelización del cliente”.

Existen varias alternativas para acercarse a la cultura del ahorro, los expertos consultados recomiendan la alcancía como el primer contacto con la educación financiera. “El ahorro debe tener un fin determinado, es decir, que el niño pueda ver la recompensa de ahorrar en un periodo de tiempo corto para que no se desmotive”, agregó Rodríguez.

La importancia de la educación en casa
Los expertos consultados coinciden en que el rol de los padres es vital, pues es durante la infancia cuando las personas construyen sus formas de pensamiento y se generan los fundamentos y hábitos de educación financiera. En ese sentido, la instrucción y el ejemplo que brindan los padres y que pueda percibir el niño son de gran valor en su formación. Ayudarle a entender de manera didáctica el valor detrás del dinero y los esfuerzos que implica conseguirlo lo convertirán a futuro en una persona mucho más responsable con su uso y administración.

Las opiniones

Santiago Rodríguez 
PhD en Finanzas de la Universidad de Tulane
“Es importante que las instituciones ayuden a educar financieramente a los niños y no solamente los vean como futuros clientes”.

Jonathan Malagón
Vicepresidente de Asobancaria
“Hay varias estrategias según la etapa de infancia, que van desde juegos temáticos para los más pequeños hasta ejercicios que les permitan contrastar el valor de las cosas”.