• Juliana Ramírez Prado

sábado, 1 de agosto de 2015

Hoy en día Colombia tiene 242.726 tarjetas profesionales vigentes y de acuerdo al Ministerio de Educación hay 166 programas de pregrado de derecho con registro calificado, de los cuales solo 19,28% cuentan con acreditaciones de alta calidad, lo que significa principalmente dos cosas: que en el país hay 166 formas distintas de enseñar cómo ser abogado y muy pocas instituciones lo hacen bajo el parámetro de calidad.

Asuntos Legales consultó a decanos de las cinco principales facultades de derecho del país y entre las propuestas para mejorar la calidad de los juristas están: volver la profesión complementaria, enseñar más que teoría competencias, hacer más énfasis en lo humano, inculcar un talante ético y sobretodo crear abogados integrales.

Aspectos como mejorar la lectura y la escritura, fomentar el criterio, profundizar en el contexto donde se desarrolla la profesión, también consideran los académicos que son tareas pendientes en lo que se debe trabajar. 

Lo anterior no dista de lo planteado hace unas semanas por los socios de los cinco bufetes más grandes del país, los cuales a parte de algunos aspectos similares a los planteados por los decanos, indicaban que era necesario incentivar en los estudiantes el aprendizaje de más de un idioma y enseñarles sobre el negocio de los bufetes, principalmente de cómo buscar un cliente, se cobra y se hace marketing de sus servicios.

Edgar Munevar, presidente del Colegio de Abogados Javerianos, aseguró que hay universidades que en el afán del negocio de la educación no cumplen con todos los requisitos más esenciales de la formación de un abogado y naturalmente el producto final, que es el recién egresado, sale al mercado laboral con algunos vacíos. “No solamente se trata de aprenderse unas normas o códigos jurídicos, sino de saber que estos se aplican en el entorno de una sociedad y en este sentido, falta profundizar en argumentación y así mismo se debe mejorar el tema crítico referente a la ética, los principios y los valores”, puntualizó Munevar.

Lo mismo considera Juan Carlos Henao, decano de la Facultad de Derecho de la universidad Externado de Colombia, al afirmar que se debe ir al paso con los tiempos, incorporar en sus métodos las nuevas tecnologías y entender el fenómeno del conocimiento global. 

Sin embargo, un proceso integral de formación no debe olvidar que el derecho es el estudio humanista por excelencia que busca formar pensadores, con una ética de servicio que se debe anteponer al interés personal. Por su parte, la decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, Helena Alviar, se centró en que más que contenidos se les debe enseñar competencias, que le den habilidades a los estudiantes para investigar, prevenir conflictos, traducir los problemas de sus clientes de manera verbal y escrita.

Desde un punto de vista más arriesgado, el decano de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario, Juan Carlos Forero, indicó que la gran reforma a la educación jurídica en Colombia debería de considerar la posibilidad de volver al derecho una profesión complementaria, es decir, que antes de ser abogado el estudiante sea por ejemplo, economista.

La profesión jurídica es muy versátil, lo que hace que el campo de acción del egresado sea amplio y variado. 

La vinculación de un recién graduado en derecho es de 72,30% y su sueldo promedio podría llegar a $2.076.965. Del cumplimiento de las tareas pendientes dependerá en gran medida su buena ubicación en el competido mercado laboral.

“Volver la profesión complementaria”
Bogotá_ El recién nombrado decano de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario, Juan Carlos Forero, opinó que la gran reforma a la educación jurídica en Colombia debería considerar la posibilidad de volver al derecho una profesión complementaria, es decir, que antes de ser abogado el estudiante sea antropólogo, médico, literato, o economista o por otra parte, reforzar el estudio multidisciplinario en el ejercicio de la profesión.

Forero, quien es un convencido de que el derecho trasciende el tema jurídico y que la mayoría de las facultades están sacando técnicos en derecho y no abogados, también ve como vital un reforzamiento en principios y en desarrollar e incentivar la lectura y la escritura.

“Estamos acostumbrados a que las decisiones tienen que ser muy extensas cuando podrían ser mas cortas y en un lenguaje accesible a todos los ciudadanos”, dijo Forero.

Por último, el decano se refirió a la importancia de las pasantías y aseguró que hay que evitar los extremos de solo enseñar teoría o de construir un pensum totalmente práctico.

“Es fundamental tener un talante ético” 
Bogotá_ Para Juan Carlos Henao, rector y decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Externado de Colombia, un abogado debe tener ante todo una formación jurídica sólida y un talante ético intachable y eso debe salir de las aulas.

Lo demás: si opta por una vida académica; cómo administrar justicia, si su destino es la judicatura; cómo procurar la buena marcha del Estado, si decide ser un servidor público, o cómo obtener negocios y ser eficiente en términos económicos si decide ejercer en un bufete, son cosas que se consolidan con la práctica, expresó Henao.

“El estudio del Derecho debe comprender el estudio de la propia tradición, con mente abierta, sin chauvinismo, y hacerla parte del estudio de la realidad social en que se pretende aplicar lo aprendido” agregó.

El académico también se refirió a que el derecho sin duda es técnica, pero a menudo se olvida que también es cultura, es ciencia viva, es reflexión, es argumentación, lo que comporta una investigación constante y eso es lo que pretende reflejar el plan de estudios de la Universidad Externado de Colombia.

“Lo que se debe enseñar son competentencias”
Bogotá_Cambiar la educación legal para pasar solamente de la reproducción de contenidos que transmiten leyes o códigos a una educación centrada en competencias, que le den habilidades a los estudiantes para investigar, prevenir conflictos, traducir los problemas de sus clientes de manera verbal y escrita, es según Helena María Alviar, decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, el principal reto que debería de asumir la academia.

Adicional, considera que es fundamental que se fortalezca la capacidad para entender el contexto donde se desarrolla el derecho, como las condiciones económicas del país o las sociales como la reconfiguración de la familia.

Por otra parte, Alviar considera que la formación no debería ser eminentemente práctica como lo plantean algunos expertos, sino que debe ser una formación donde los estudiantes se interioricen y aprendan las bases teóricas de la práctica. 

Actualmente, la Universidad de los Andes tiene cerca de 1.100 estudiantes en las filas de su pregrado de derecho.

“Falta hacer más énfasis en lo humano”
Bogotá_Las facultades de Derecho en el país tienen el reto de graduar abogados que estén comprometidos con el momento histórico que el país vive, capaces de construir a partir de las diferencia. Que no solo sean expertos en lo jurídico, sino que tengan un gran sentido de lo humano, de acuerdo a Julio Andrés Sampedro, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Javeriana.

“Las facultades han venido trabajando mucho en el tema del criterio y en una visión extendida y es un reto importante seguir apostando en ello” agregó.

Para Sampedro hoy en día los abogados están saliendo bien preparados aunque no de todas las instituciones y puntualizó que siempre en la educación hay camino por recorrer y por mejorar. Adicional, considera que para lograr la excelencia de los abogados no solamente se llega por el fundamento de las facultades, sino por el compromiso permanente de alumnos. La Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Javeriana, la cual fue fundada hace 85 años, cuenta con aproximadamente 5.400 egresados.

“Hay que crear abogados integrales”
Bogotá_El líder de la facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional, Genaro Alfonso Sánchez es un convencido de que la obligación de la academia es crear abogados integrales.

Por ejemplo, Sánchez explicó que en la Nacional, la carrera está dividida en tres grandes áreas. Primero, el área de fundamentación donde a los estudiantes se le dan los elementos para conocer las ciencias sociales como la filosofía y sociología, luego estudian las materias propias del derecho, y por último hay un área flexible de libre escogencia donde se le concede al estudiante la autonomía de elegir el área que quiera. 

El decano afirma que “con este plan de estudios donde la mayoría de las materias no tienen requisitos ni prerequisitos los alumnos toman sus propias decisiones y se les comienza a formar el criterio, lo que es fundamental a la hora de ejercer la profesión”. 

La facultad que está próxima a cumplir 150 años de creada, recibe solamente 80 estudiantes de pregrado por semestre y en sus filas tiene cerca de 800 alumnos.

Las opiniones

Edgar Munevar
Presidente Colegio de Abogados Javerianos
“Hay universidades que en el afán del negocio de la educación no cumplen con los requisitos más esenciales de la formación de un abogado y naturalmente el producto final sale al mercado con vacíos”.

Pedro Enrique Sarmiento
Socio Director Tax & Legal Deloitte Asesores & Consultores
“Vinculamos a profesionales de las mejores universidades, no solo de Bogotá, también de provincia. La gente llega y nosotros terminamos de formarlos enfocando todo hacia nuestra necesidad”.