El tobogán del dólar beneficia al consumidor

Este segundo mes del año arrancó con un dólar cotizando a la baja y dando señales que ya le cuesta (por ahora) sostenerse en el nivel de los $3.000. Desde el pasado 3 de octubre, la moneda estadounidense no tenía un cambio tan bajo frente al peso colombiano: el precio promedio fue de $2.882,19, cifra que significa una caída de $24,59, alcanzó un máximo de $2.893  y su cierre fue de $2.879. ¿Por que el dólar está nervioso? Se puede explicar la situación si mirados tres razones internacionales. La primera tiene que ver con los precios del petróleo que vienen subiendo y alcanzaron US$56,95 por barril, en lo que tiene que ver con el tipo Brent. Vuelve y juega el parámetro (no siempre aplicable) que la divisa baja cuando el crudo sube. El segundo factor o razón de baja de la moneda es la consecuencia de que la Reserva Federal haya mantenido estables sus tasas de interés y las dudas que sembró sobre que las vaya a subir en el corto plazo. Y el tercer factor externo son los constantes comentarios del gobierno Trump diciendo que a EE.UU. le conviene un dólar débil, lo que está generando incertidumbre en el mercado de divisas. Y si vemos las razones internas en Colombia, anotamos que en las siguientes semanas se espera una avalancha de monetizaciones para el pago de impuestos; a lo que se suma la debilidad de entrada de inversiones a México, situación que a la postre mueve el dólar por la llegada de capitales a mercados como el colombiano. Cuanto más se enrarezcan las relaciones entre México y Estados Unidos, más capitales pueden llegar a Suramérica, especialmente inversionistas del sector de hidrocarburos, quienes empiezan a salir de las vacas flacas en términos de precios del petróleo, que se arriman a los US$60 por barril. ¿Qué va a pasar al cierre del primer trimestre del año? Lo más seguro es que el petróleo va a seguir por encima de los US$50 en el corto plazo, lo que le da estabilidad al dólar por debajo de $3.000. La próxima reunión de la Fed será en junio, entre tanto la expectativa de estabilidad va a ser la misma sobre la tan anunciada alza de tasas. Y finalmente, las acciones del gobierno Trump -en sus primeros días en la Casa Blanca- han devaluado el dólar, situación que no se mantendrá, pues eventuales cambios en la política fiscal o la puesta en marcha del programa de infraestructura podrían cambiar la tendencia de la moneda. ¿Cómo sacarle provecho al dólar más barato de los últimos cuatro meses? Si bien un dólar por encima de $3.000 es saludable para la economía colombiana vía exportaciones, para el grueso de los consumidores un leve respiro de la divisa se siente en los bolsillos, no solo por que se pueden pagar deudas contraídas en dólares, sino que es benéfico para el turismo internacional, para el ahorro y para importar bienes y servicios. Lo ideal es mirar los ciclos y poder saber en qué momento comprar o vender y obviamente es un momento de oro para los importadores.