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miércoles, 17 de agosto de 2016

 “Un Conpes no se le niega a nadie”, enseña el adagio popular, es decir que en algunas (¿muchas?) ocasiones, termina siendo un documento que contiene buenas intenciones, que por las más diversas razones no llegan a materializarse. Independientemente de ello, es importante analizar el reciente Conpes denominado “Plan Nacional de Desarrollo Productivo” (Pndp) anunciado por la Ministra de Comercio . 

El documento atribuye a tres causas, la baja productividad del país: fallas del mercado y de gobierno en factores económicos, disminución del número de actividades económicas y productos en los que Colombia llegó ser más competitivo que otros y fallas de articulación entre los gobiernos nacional y regionales, entre el sector público y el privado, y entre entidades del orden nacional. 

Son tres las propuestas incluidas en el documento para superar esos escollos. Para la primera, se propone mejorar las capacidades de las unidades productoras para innovar y emprender. Además cerrar las brechas de capital humano y finalmente, generar un entorno que promueva la competencia de los bienes y servicios colombianos en mercados domésticos e internacionales.

Para la segunda causa, la principal estrategia consiste en priorizar apuestas a nivel departamental que estimulen la diversificación de la producción de bienes y servicios con el fin que el gobierno nacional focalice los instrumentos sectoriales de apoyo.

Y finalmente para la tercera causa se propone “un entorno institucional que garantice la coordinación entre actores (públicos y privados, nacionales y regionales) y la sostenibilidad de la PDP en el largo plazo”, definido este en un periodo de 10 años (2016-2025).

La segunda propuesta merece especial atención pues para fortalecer y ampliar la canasta exportadora, hay que centrarse en el aspecto regional. No se trata de hacer un nuevo diagnóstico para identificar productos y servicios.  En el pasado reciente y con la intención de aprovechar los acuerdos comerciales suscritos por Colombia, el gobierno creó y luego liquidó, el Centro de Aprovechamiento de Acuerdo Comerciales (Caac), el cual hizo juiciosamente esa tarea.  También lo han hecho MinComercio, ProColombia, gremios, Cámaras de Comercio y universidades.    

En otras palabras pareciera que las regiones tienen claro en que son o podrían ser productivas y competitivas.  Queda entonces la duda ¿qué es lo que falta para concretarlo? La respuesta facilista es que falta plata, pero está comprobado que las buenas ideas, aquellas que tienen factores de innovación, diferenciación y que por ende son competitivas a nivel mundial, siempre tienen financiación. 

El enfoque regional para diversificar las exportaciones y aumentarlas de manera sostenida es correcto, en un país de regiones y realidades diferentes.  El “que” está claro.  Debemos seguir trabando en el “cómo”. De allí que la priorización de apuestas productivas con enfoque geográfico, que tengan en cuenta el concepto de las cadenas globales de valor, es buena parte la respuesta, pero necesitamos que no se quede solamente en buenas intenciones.