lunes, 27 de junio de 2016

Mucho tiempo ha transcurrido y varias situaciones similares se han presentado; en el partido Francia- Irlanda un gol con la mano de Thierry Henry eliminó a los irlandeses; a pesar de la confesión del jugador francés nada ocurrió y se especula, que Fifa pagó a algunos dirigentes irlandeses (nada nuevo) para que guardaran silencia. Hace poco tiempo un paraguayo, Marco Lazaga hizo un gol con la mano que le permitió al Cúcuta ganar la categoría y dejó al Quindío en la primera B. el más reciente episodio de esta zaga (bastante resumida, por cierto) fue el gol peruano a Brasil en la pasada copa América.

La llegada de la televisión con muchísimas cámaras hace mucho más complicado el asunto, pues de manera prácticamente automática, el error del árbitro o de los árbitros es reconocido pero, desafortunadamente, la única persona que no puede saberlo es precisamente el único que podría enmendar dicho error. Al árbitro le está prohibido utilizar cualquier tipo de ayuda y el ridículo, como el del partido Perú-Brasil es infinito. Todos sabíamos que fue gol con la mano pero como el árbitro no lo vio, su juez de línea tampoco, mucho menos el cuarto árbitro que está en la mitad de la cancha, fue gol, Brasil a la casa y Perú a cuartos.

No es fácil implementar un sistema de repetición automática, costos y definición de reglas lo hace complejo; no todos los partidos pueden ser monitoreados por muchas cámaras; tampoco cualquier jugada es susceptible de ser modificada, no es lo mismo un saque de banda mal sancionado, una mano en la mitad del campo o un fuera de lugar milimétrico que una expulsión al jugador equivocado o como yo hemos visto goles claramente ilegítimos.

La liga de Fútbol Americano, NFL, la más exitosa del deporte admitió desde hace mucho tiempo la posibilidad de utilizar la tecnología en sus juegos. El primer acercamiento se hizo por allá en 1976 y hoy después de probar, ensayar y pulir esta ayuda a los árbitros está implementado de manera exitosa en todos los partidos de esta liga. Este sistema de repetición instantánea deja varias enseñanzas.

Los inconvenientes son varios; necesidad de tecnología, por lo que se crearían partidos de dos niveles, con o sin repetición instantánea; por otra parte el ritmo del partido cambia y podría ser utilizado este recurso para “quemar tiempo”, maniobra utilizada de manera generalizada, al menos en el fútbol sudamericano. 

Es necesario identificar que jugadas son susceptibles de ser revisadas, quien debe pedir la repetición y que ocurre en el evento en que la revisión no es exitosa (no se cambia la jugada).

Sin lugar a dudas los goles deben ser revisados o al menos ser susceptibles de revisión, faltaría definir qué otras jugadas podrían ser revisadas, por otra parte, puede haber jugadas dudosas que ninguno de los dos equipos reclama, por lo que no se ve la necesidad de revisarlas. También es importante definir quién puede pedir repetición y cuantas veces por partido.

Se trataría de un gran avance, implementarlo al menos en partidos internacionales de primera categoría sería beneficioso, las dificultades son enormes pero el resultado y sobre todo la certeza de que injusticias como las mencionadas superan con creces estas dificultades.