• Colprensa

sábado, 13 de septiembre de 2014

Su llegada al Gobierno Nacional estaba cantada desde que Juan Manuel Santos ganó la reelección en julio pasado. Con poco más de una semana en el cargo de ministro de la Presidencia, Néstor Humberto Martínez dice que está contento de volver al Ejecutivo, 15 años después de haber sido ministro del Interior.

Tiene claro, dice, que además de ejercer como consejero, su labor será mejorar el diálogo del mandatario con todos los sectores de la Nación.

Niega que haya llegado para mandar a los ministros y dice que aún no hay interés del presidente, Juan Manuel Santos, de crear el Ministerio de la Seguridad, propuesta que hizo en campaña.

¿Por qué volver al sector público? ¿Cómo ha sido ese regreso?
Ha sido interesante volverse a poner la camiseta de funcionario público después de quince años. Esta ha sido mi primera semana como ministro de la Presidencia y ha sido una experiencia maravillosa mirar desde acá a todos los sectores de la vida nacional y ver un gobierno en marcha, que está al servicio de la paz, de la equidad y de la educación.

Su nombramiento, al igual que el de los otros ministros consejeros, despertó críticas en la opinión pública. ¿Su cargo es una cuota burocrática para cumplir compromisos políticos?
Ahí no hay ninguna cuota burocrática, no venimos a aumentar la grasa del sector público, sino su músculo y las neuronas.

Se ha dicho que es el ‘superministro’. ¿Cuáles son sus funciones y cómo ha sido su gestión?
Son asesorar al presidente y coadyuvar en su gestión con las demás ramas del poder público. Igualmente, mantener un diálogo político con las fuerzas del Congreso y con los distintos sectores sociales que forman parte vital del sistema en un régimen presidencial. También articular esa gestión de gobierno con los demás ministros consejeros, lo que constituye una labor importantísima para hacer más efectivas las iniciativas del Presidente de la República.

¿Dónde se traza la línea que diferencia sus funciones y las del Ministro del Interior?
La coordinación de los ministerios nunca ha sido papel del Ministerio del Interior. La coordinación se ejerce desde la Presidencia de la República, siempre se ha ejercido desde allí y ahora lo hacemos en un equipo, al que se le asignó una labor específica.

¿Realmente el cambio de la estructura de la Presidencia está dando eficacia al Gobierno? ¿Cómo es ese nuevo diálogo?
La idea es que en un sistema presidencialista como el nuestro, en el que la gestión pública y la de gobierno son cada día más complejas, el Presidente cuente con un grupo de asesores de muy alto nivel que le contribuyan en su gestión, en la tarea de coordinación de todo el aparato gubernamental. Todo eso para impactar más con las políticas públicas y comunicar de mejor manera los resultados, que en el caso de Juan Manuel Santos son óptimos en todos los frentes, no solo en la economía sino en lo social, donde estoy completamente seguro, habrá avances importantes.